La refinación tuvo un buen desempeño por la inversión en el sector, según el BCE. Foto: Archivo / EL COMERCIO
Para el Gobierno,los últimos datos presentados por el Banco Central del Ecuador (BCE) evidencian que la economía está en “franco crecimiento”. El sector productivo teme que las cifras se apuntalen en un mayor endeudamiento y no en una genuina recuperación.
El reporte de crecimiento se presenta oficialmente hoy, aunque el BCE adelantó algunos datos en el enlace realizado el sábado en Los Ríos.
El Producto Interno del Ecuador (PIB) creció el 1,7% en el cuarto trimestre del 2016 frente al trimestre anterior, según esas cifras. Y comparado con el cuarto trimestre del 2015 registró un aumento del 1,5%.
Para el presidente Rafael Correa esto significa que el país ha superado la recesión. “Aguantamos cuatro trimestres seguidos de decrecimiento, pero ya, a partir del segundo trimestre de 2016 empezamos a crecer, técnicamente salimos de la recesión y el último trimestre ha sido muy bueno”, detalló el Mandatario.
La gerenta del BCE, Madeleine Abarca, consideró incluso que en un mes más, si las cosas continúan como están, la economía entrará en “expansión económicamente hablando”.
Entre los sectores que registraron un buen desempeño, según la funcionaria, están suministro de energía, servicio doméstico y refinación. Este último creció en un 45,9% entre el último trimestre del 2016 e igual período del año previo. “La refinación es una industria a la que nosotros hemos apostado. El año anterior el Gobierno metió mucha inversión en la Refinería Esmeradas y ahora tiene un gran crecimiento”.
Abarca apuntó, además, que en el último trimestre el sector de la construcción, que venía decreciendo, “ya empezó a dar señales de reactivación”.
Pero la actividad inmobiliaria, que es uno de los componentes del sector de la construcción, no ve una recuperación. “El sector ni siquiera se ha estabilizado”, dijo el presidente de la Cámara de la Industria de la Construcción (Camicon), Silverio Durán
Los proyectos de vivienda cerraron el año pasado con ventas a la baja y un número cada vez menor de visitas de clientes a los proyectos de vivienda. En el último trimestre del 2016 el número de reservas de vivienda (promesas de compraventa en nuevos proyectos) cayó en un 47% respecto de igual período del 2015, de acuerdo con datos de la encuesta que realiza la Asociación de Promotores Inmobiliarios de Viviendas del Ecuador (Apive) y que fue publicada en febrero pasado.
Para la Camicon, varios factores explican esta caída. Entre ellos están la situación económica del país debido a la caída del precio del crudo y la incertidumbre generada por nuevos tributos a la actividad como los establecidos en diciembre por la llamada Ley de Plusvalía.
Este año el sector prevé una situación similar a menos que se tomen medidas para impulsar la actividad. Una de ellas puede ser exonerar del pago de la Ley de Plusvalía a todo el sector de la construcción y no solo al enfocado en vivienda social, sugirió Durán.
En el sector industrial, las empresas que crecieron fueron aquellas enfocadas en la exportación, pero aquellos negocios que dependen del mercado interno siguen con bajas ventas, comentó Andrés Robalino, director de la Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca, que reúne a 102 empresas afiliadas.
Si bien las empresas cuencanas que proveen insumos a los sectores de exportación de camarón y banano, como cartoneras, crecieron entre 7 y 10%, el sector productivo de la ciudad en general cayó en un 25%.
Entre los sectores que decrecieron están línea blanca, de mobiliario, de alimentos y bebidas y construcción. Este último cayó hasta en un 40%, dijo Robalino. “El sector industrial tuvo un cuarto trimestre del 2016 sumamente difícil”.
Robalino no ve aún una genuina recuperación de la economía. Para él, la inyección de liquidez del Fisco a través de financiamiento contribuyó a dinamizar la economía los últimos meses.
El sector comercial estuvo estancado en el último trimestre, dijo Patricio Alarcón, presidente de la Cámara de Comercio de Quito. Para elevar ventas, las empresas emprendieron con descuentos, pero esto tiene una impacto en su margen operativo, dijo.
Desde los últimos meses del 2016 el consumo se reactivo gracias a una inyectada de liquidez del Fisco, dijo Alarcón, pero cree que esto no es sostenible en el largo plazo.
Entre el año pasado y el primer trimestre de este año el Fisco ha acudido cuatro veces al mercado internacional y ha obtenido USD 3 750 millones, con tasas de interés que van del 9,1 al 10,75%.
También, obtuvo préstamos de liquidez del BCE, una política que siguió este año. En los tres primeros meses del 2017 consiguió USD 1 500 millones de la entidad.
Para Nicolás Acosta, director del Reporte de Consistencia
Macroeconómica de la PUCE, estos desembolsos impactan en la economía, pero no necesariamente muestran que el país está produciendo más.
La inyección de liquidez dinamizó el sector de consumo, lo cual se reflejó en un alza en la recaudación desde el último trimestre del año pasado, anotó. Las caídas y alzas de la tasa de crecimiento de la economía “no evidencian que estamos en un sendero de crecimiento, sino en una economía muy volátil”, consideró Acosta. Este Diario consultó el tema ayer al BCE, pero no hubo respuesta hasta el cierre de esta edición.