Las cajas con documentos de archivo del BEV se encuentran organizadas en estantes. Foto: EL COMERCIO
El plazo para legalizar las propiedades adquiridas con financiamiento del Banco Ecuatoriano de la Vivienda (BEV) se amplió, debido a que la concurrencia de personas a esta entidad ha aumentado.
La gente que llega a esta institución en liquidación acude a legalizar sus escrituras, cancelar sus hipotecas y levantar la cláusula de patrimonio familiar que rigen sobre sus casas o departamentos.
Inicialmente, estaba previsto que se este tipo de trámites se realicen hasta fines del 2019, pero debido a que todavía existen procesos pendientes se resolvió ampliar el plazo hasta fines de marzo del presente año, refirió Paulina Noboa, liquidadora del banco.
La entidad tiene previsto cerrar sus puertas en mayo del 2020, tras 59 años de vida institucional.
Los propietarios de los inmuebles que no cumplan con los trámites en los plazos establecidos deberán recurrir después a los procesos judiciales normales. Es decir, un juez determinará la procedencia para la ejecución de estos papeleos, explicó Noboa.
Para evitar este escenario, los clientes del BEV deben acudir a esta entidad para realizar los trámites. Lo pueden hacer en las oficinas de Quito, Guayaquil y Portoviejo.
En Quito, el BEV está ubicado en la avenida 10 de Agosto y Luis Cordero. Ahí de lunes a jueves, desde las 08:30 hasta las 16:30, se reciben carpetas y se brinda información. En promedio, a diario se entrega un total de 250 turnos. La atención al público es continúa.
El viernes, en cambio, no hay atención para los clientes, debido a que ese día los funcionarios del BEV deben despachar la mayor cantidad de trámites.
En el 2019 se realizaron 1 512 procesos relacionados con legalización de escrituras, cancelación de hipotecas y levantamiento de la cláusula de patrimonio familiar. Las personas que no cumplan con este último paso tendrán limitaciones para vender su propiedad. Además, hay 700 trámites que están en proceso.
En promedio, la resolución de estos papeleos puede tomar alrededor de seis semanas desde el momento que ingresa la carpeta con todos los documentos, informó el BEV.
En la documentación, entre otros requisitos, se debe incluir un certificado de gravamen o historial de gravámenes del Registro de la Propiedad. Sin embargo, no todas las personas presentan este insumo, por lo que se genera demoras en el proceso.
Además, como se trata de documentos que datan de la década de 1980, se debe recurrir al archivo para validar esa información y eso lleva un tiempo. Esta documentación se encuentra dentro de cajas numeradas que están organizadas en estantes y en el piso.
De acuerdo con el tipo de procedimiento, el cliente debe cancelar entre USD 11,20 y 17,80 en el Banco Ecuatoriano de la Vivienda. Sin embargo, hay otros procesos que se realizan con notarios y abogados externos. Allí los valores dependen de cada profesional.
La entidad no puede determinar cuántos predios están pendientes por ser regularizados. El Banco Ecuatoriano de la Vivienda promovió la construcción de planes habitacionales en Quito, Guayaquil, Ambato, Cuenca, Portoviejo, Manta y otras ciudades.
La entidad tuvo su ‘boom’ en los años 80. Pero el 12 de febrero del 2015, el Gobierno dispuso su liquidación para que el programa Casa para Todos asuma ciertas funciones.
Para agilizar los papeleos, el BEV solicitó a los municipios información sobre las propiedades que aún están a favor del Banco, para notificar a los dueños que el tiempo para regularizar sus bienes se acorta.
Noboa mencionó que a este pedido han respondido los municipios de Quinindé, La Concordia y Esmeraldas. El de Quito ha dado la apertura para poder trabajar directamente con el Registro de la Propiedad. Sin embargo, todavía hace falta el apoyo de otros gobiernos locales.