El acceso al sitio donde se estrelló la nave está restringido. La Policía custodia el lugar. Foto: Cortesía Diario La Marea
El terreno en donde se estrelló una avioneta blanca, la noche del domingo 10 de marzo de 2019, está cercado por policías. Nadie puede pasar a la zona de siniestro, pero las fotografías filtradas por los comuneros muestran una nave totalmente incinerada.
Un poco antes de las 21:00 del domingo, la gente que vive en Río Bravo -comuna del cantón Montecristi (Manabí)- escuchó un estruendo en el sector de Los Bajos, vía a Los Manantiales, entre los ríos Bravo y Cañar. Estos detalles fueron reportados de inmediato al sistema ECU-911.
En ese sitio, bomberos y agentes hallaron la nave, con matrícula N 75RC, pero ya estaba consumida por las llamas.
Además, descubrieron droga quemada, cargadores de celulares, 16 canecas de combustible y una pista clandestina que estaba ubicada a 800 metros.
En medio de las primeras investigaciones, los policías recuperaron 39 kilos de clorhidrato de cocaína que tenían como destino México.
En un comunicado, la Dirección de Aviación Civil indicó que la Junta Investigadora de Accidentes se activó de manera inmediata. La idea es determinar las causas del incidente.
Según el general Luis Lara, comandante policial de Manabí, la avioneta se siniestró por el peso de la carga. Al parecer, intentó despegar y se impactó contra un árbol. El jefe policial indicó que la aeronave no contaba con permisos de operación ni plan de vuelo autorizado por la Aviación.
No es el primer incidente que se reporta en el país. El 4 de marzo del 2018, una avioneta blanca tipo Cessna con matrícula NI0666 se estrelló en la isla Matorrillo, sector de Mondragón, al sur de Guayaquil.
Las dos personas que iban a bordo de esa aeronave fueron hospitalizadas y retenidas para investigaciones. Aunque esa vez no se hallaron drogas ni dinero, los agentes dicen que ahora las avionetas son usadas para el envío de sustancias hacia Centroamérica o México.
Este tipo de aeronaves tienen una capacidad de almacenamiento de hasta 3 toneladas de droga, según agentes.
Datos de la Policía advierten que desde el 2003 a la fecha, 20 avionetas han sido decomisadas entre las provincias de Manabí, Guayas, Los Ríos, Santa Elena, Esmeraldas y Santo Domingo. 107 personas han sido detenidas en los operativos.
En Manabí, los servicios de Inteligencia policial han detectado que las pistas clandestinas son montadas con seis meses de anticipación antes de la llegada de las naves.
Las mafias usan terrenos que se encuentran en zonas alejadas y montañosas. A estos se llega por caminos de tierra, custodiados por gente armada.
El 2015, en la vía Manta- Portoviejo operó una pista clandestina. Era de asfalto y tenía una extensión de 300 metros.
En octubre del año pasado, este Diario llegó al sitio y constató cómo el terreno estaba siendo removido y había fragmentos de pavimento.
Por levantar una pista ilegal y por arrendar un pedazo de tierra para ocultar los narcóticos las bandas internacionales pagan desde USD 200 000.
Los agentes aseguran que para dejar lista la tierra y pavimentar, los pilotos primeramente vienen al país, analizan la temperatura y las corrientes de aire. Así determinan la factibilidad de los trabajos. Lara dijo que la pista donde se estrelló la avioneta el domingo estaba mal construida, pues había árboles que impedían el vuelo.