El improvisado campamento de migrantes ubicado en el puente a desnivel del parque Benjamín Rosales, en Guayaquil, fue desmontado por agentes de la Policía Nacional y Metropolitana. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
Eran cerca de las 12:30 de este martes 1 de octubre del 2019 y un piquete de policías arribó hasta el área de parqueaderos de las canchas deportivas municipales, ubicadas en el intercambiador de tráfico que comunica la avenida de las Américas con la autopista Narcisa de Jesús, frente a la Terminal Terrestre de Guayaquil.
A la presencia de 170 policías nacionales se sumaron 65 policías metropolitanos. Ellos fueron los encargados de desalojar a unos 150 ciudadanos extranjeros que, desde hace varios meses, habitaban en el lugar. En el operativo estuvo también personal del Municipio porteño, de la Gobernación del Guayas y de otras instituciones como el MIES.
La acción, desarrollada al mediodía de este martes, llegó dos días después de que se registraran en el lugar enfrentamientos entre un grupo de patinadores y ciudadanos que ahí habitaban. Por el altercado, tres de los patinadores resultaron con heridas.
Las autoridades advirtieron a cada ciudadano que debía abandonar el lugar. El anuncio encendió los ánimos. Varios desarmaron sus casas improvisadas con plásticos y sábanas. Algunos, con niños en brazos, recogieron sus enseres rápidamente. Básicamente se redujo a unas pocas mochilas que eran cargadas en la espalda o a bordo de carriolas.
“No tenemos a dónde ir, de aquí nos sacan muertos”, fue la reacción de una mujer. A ella la rodearon varios migrantes que se negaron a abandonar el lugar, sin embargo salieron del sitio. Juan, caraqueño de 24 años, afirmó que se irían hasta la cooperativa Sergio Toral, lugar en el que personas del sector privado le ofrecieron estadía temporal.
Los migrantes tomaron sus pertenencias y a sus familiares y salieron del lugar. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
El complejo tiene pistas para patinadores y canchas de fútbol. En los últimos días decenas de ciudadanos cuestionaron el cuidado de las instalaciones. En un breve recorrido, se constató desechos fecales y preservativos.
Ramiro Ortega, comandante de la Zona 8, comentó que la acción dejó dos retenidos porque presuntamente son sospechosos de haber participado en delitos de acción pública en las inmediaciones de la Terminal Terrestre. “Se presume que estarían vinculados al asalto y robo a mano armada a personas mediante el empleo de armas blancas”.
La acción, desarrollada al mediodía de este martes 1 de octubre del 2019, llegó dos días después de que se registraran enfrentamientos entre un grupo de patinadores y ciudadanos que habitaban en el lugar. Foto: Enrique Pesantes / EL COMERCIO
“La Policía Nacional brindará acompañamiento a las acciones de seguridad que realice el Municipio en virtud de que este espacio le corresponde administrar al Municipio”, reiteró Ortega.
El director de Justicia y Vigilancia del Municipio, Xavier Narváez, aseguró que no se brindó una reubicación a los desalojados. “No tenemos ese plan porque es una cuestión de Gobierno, lo que no podemos permitir es que este sitio y otros públicos, que tienen otro fin para lo que fueron creados, se conviertan hoy no solo en dormitorios sino en otros como la venta de droga, consumo, prostitución…”.