El rector de la Universidad de Guayaquil, Galo Salcedo, celebró la medida planteada por el Tribunal Distrital de lo Contencioso Administrativo. Esta paraliza la ejecución de su salida, dispuesta por la Contraloría en un examen de detectó la emisión de 28 títulos con inconsistencias. Foto: Elena Paucar/ EL COMERCIO.
No es una medida definitiva pero en la Universidad de Guayaquil celebraron como si lo fuera. Este miércoles 26 de septiembre de 2018, el Tribunal Distrital de lo Contencioso Administrativo de Guayaquil frenó, temporalmente, la ejecución de la destitución del rector Galo Salcedo, resuelta por la Contraloría General del Estado. Esto mientras los jueces analizan la demanda presentada por el directivo.
Romell Martínez, procurador síndico de la universidad, dijo que Salcedo accedió a un auto de calificación. El documento del tribunal indica que “es jurídicamente imposible por parte de la entidad accionada (es decir, la Contraloría) ejecutar el contenido del acto administrativo impugnado ni en lo que respecta a la destitución ni tampoco al cobro de la multa impuesta por no haber alcanzado ejecutoría, ya que el asunto principal ha sido sometido al conocimiento de los suscritos juzgadores”.
Según el procurador, con esta disposición también se paraliza el pedido del Consejo de Educación Superior (CES) de cumplir “obligatoria e inmediatamente” la resolución del organismo de control. “Cuando inició la vía judicial, la vía administrativa terminó. El CES y la Contraloría, que son entes administrativos, ya no pueden disponer. Tienen que esperar que resuelva la vía judicial”, puntualizó Martínez.
El rector de la U. de Guayaquil fue notificado el pasado 20 de agosto por la Contraloría con responsabilidades administrativas de destitución y multa. Esa fue el resultado de un examen especial que detectó la emisión de 28 títulos de abogados con irregularidades, en el 2016.
El plazo para la apelación es de 60 días y Salcedo presentó dos recursos, en medio de los protestas para que dejara el cargo. La demanda por lo Contencioso Administrativo fue plantea el lunes de la semana anterior.
La tarde de este miércoles 26 de septiembre del 2018 entró a la sala del Consejo Universitario entre gritos de apoyo del personal del rectorado. Quienes lo respaldan llegaron con carteles, banderas, incluso lanzaron fuegos artificiales en medio de un campus desolado; por ahora no hay clases en la universidad.
“Galo Salcedo Rosales sigue siendo rector de la Universidad de Guayaquil. Cumpliré mis funciones dentro de la ley”, dijo el directivo en un breve y enérgico discurso.
La Contraloría observó que las actas fueron emitidas sin que los estudiantes realicen o culminen sus trabajos de titulación. Carlos Robalino, abogado particular de Salcedo, explicó que este problema surgió por un retraso en la creación de la Unidad de Titulación de la Facultad de Jurisprudencia, que ocurrió antes de que Salcedo llegara al rectorado.
Además indicó que, según el estatuto de la universidad, la verificación del cumplimiento de los requisitos para la obtención de un título es responsabilidad del director de la carrera, del decano y del secretario de la facultad.
“El rector lo único que hace es legalizar o refrendar ese título, en base al acta de grado que se emite en la facultad. Por tanto, si esos alumnos no cumplieron esos requisitos, era imposible que el rector lo supiera porque a él no le corresponde revisarlos”, señaló.
Los procesos por la vía de lo Contencioso Administrativo pueden tomar hasta un año, según indicaron los abogados. Mientras, la Contraloría mantiene otros 17 exámenes especiales sobre el centro de estudios. El más próximo a tener una resolución es el que evaluó el funcionamiento de la empresa pública de la Facultad de Ciencias Matemáticas y Físicas.