La gente camina por un graffiti que dice: “Paris no cede al miedo” tras un minuto de silencio, el 16 de noviembre de 2015 en la estación del metro Republique en París, para rendir homenaje a las víctimas de los atentados. Foto: Archivo / AFP
El principal sospechoso de los atentados terroristas en París, Salah Abdeslam, había colgado tres semanas antes de los ataques una bandera de la milicia yihadista Estado Islámico (EI) en redes sociales, pero las autoridades no emprendieron acción alguna, aseguró el martes 17 de mayo del 2016 la emisora belga RTBF.
Los investigadores creen que Abdeslam, un ciudadano francés que había vivido en Bélgica, es el único miembro superviviente del grupo de terroristas que perpetró los atentados en la capital francesa el pasado 13 de noviembre, que causaron 130 muertos.
Abdeslam, de 26 años, fue arrestado en marzo en Bruselas y más tarde extraditado a Francia, donde está acusado de asesinatos terroristas.
No se sabe exactamente cuál fue su papel en los ataques en París. Según la emisora RTBF, el Órgano de Coordinación para el Análisis de la Amenaza (OCAM) de Bélgica sabía que Abdeslam había colgado la bandera del EI en Internet pero ni la Policía ni los servicios de inteligencia reaccionaron.
Abdeslam y su hermano Brahim, quien se hizo volar por los aires en París, habían sido interrogados por la Policía belga a principios de 2015 porque existía la sospecha de que pretendían viajar a Siria. Sin embargo, fueron puestos en libertad sin cargos en aquel momento.
La Fiscalía belga había pedido que el teléfono y el correo electrónico del hermano de Abdeslam fueran monitoreados, pero esto nunca ocurrió debido a una falta de fondos, según investigaciones de un organismo de supervisión policial que fueron filtrados a los medios el mes pasado.