La estructura de esta tienda, en la avenida principal entre Tonsupa-Atacames, colapsó tras el movimiento. Foto: Marcel Bonilla/ EL COMERCIO
El sismo de 5.7 grados de ayer, 19 de diciembre, terminó de destruir las edificaciones que sufrieron daños menores en el evento telúrico del pasado lunes 12. En ese temblor de 5.1 grados, las estructuras de edificios y viviendas del cantón Atacames quedaron con fisuras y grietas.
Con el movimiento de este lunes, 70 infraestructuras están afectadas; 10 colapsaron, incluidos tres hoteles en Atacames y Tonsupa; y seis instituciones educativas averiadas. Ese es el reporte de la Gobernación.
Este organismo reportó 47 heridos y tres fallecidos. Fueron una mujer de 62 años y un hombre de 76 años. El tercero no ha sido identificado.
En la ciudad de Esmeraldas hubo afectaciones en la mampostería de cuatro viviendas.
Las evaluaciones continuaron hasta la tarde de ayer. Para ello, el Cuerpo de Bomberos de Atacames abrió un punto de atención para registrar a las familias que reportan los daños.
El presidente Rafael Correa pidió que las inspecciones a la infraestructura hotelera fueran minuciosas y que se verificará si cumplieron o no con las normas técnicas de la construcción.
“En el terremoto de abril perdieron la vida muchas personas por la mala calidad constructiva. Esto ya no puede pasar, se debe llegar a los responsables de las malas construcciones para que respondan y eso se ha pedido a la Fiscalía”.
Los empleados y dueños del Hotel Casas del Mar (Tonsupa) sacaron las cosas de la infraestructura que colapsó ayer con el sismo de 5.7 grados. Juan Carlos Pérez / EL COMERCIO
El coordinador de los Bomberos en Atacames, Ángel Sosa, aseguró que hasta el mediodía se receptaron 300 reportes de daños en viviendas de sectores como Guayacanes, Nueva Esperanza, Capitán Jiménez y Los Albergues.
Sosa aclaró que solo es un registro verbal que podría variar con una inspección en el sitio. Este trabajo lo realizarán los ministerios de Desarrollo Urbano y Vivienda y de Inclusión Económica y Social.
El presidente Correa indicó en su cuenta de Twitter que ya había 700 familias registradas por pérdida parcial o total.
En el sector hotelero, las pérdidas se dieron en los sitios Cabaplan y Club del Pacífico de Tonsupa y en el malecón de Atacames. Los hoteles Casas del Mar, Fogón Manabita y el hostal El Encuentro presentaron daños mayores que las autoridades calificaron como colapso estructural.
En los bajos del Hotel Casas del Mar, de tres pisos, funcionaban una despensa y una pizzería. El dueño de este último local, Geovanny Magallán, señaló que la actividad estaba despuntando desde julio cuando empezó a reactivarse la economía. Él rentó el local en mayo y se arriesgó a invertir pensando que pronto terminarían los efectos del terremoto de abril. “Ahora no me queda nada, solo unos pocos muebles que me llevo a casa”.
En el hostal El Encuentro se hundió toda la planta baja donde funcionaba un restaurante y una despensa. Francisco Zambrano, propietario del inmueble, contó que alcanzaron a salir con su esposa de la planta baja donde dormían. “Hemos perdido la inversión de 30 años en pocos segundos”.
El Hotel Fogón Manabita, en el malecón de Tonsupa, sector Cabaplan, tiene daños en su estructura y mampostería. Foto: Marcel Bonilla / EL COMERCIO
La construcción de hormigón armado que se levantaba junto a la playa estaba valorada en USD 300 000.
A 50 metros del hostal de Zambrano, también se afectó el Hotel Fogón Manabita. Las paredes laterales se fueron al piso y la fachada se destruyó.
En el malecón de Atacames, el colapso del Hotel Sanvalle alcanzó al restaurante Andarele que se encuentra a un costado. Katty Quiñónez, la propietaria del restaurante, contó que previno a las autoridades pero no le dieron respuesta. “Ese hotel ya tuvo daños en el terremoto de abril, pero nadie hizo nada para derrumbarlo”.
La zona turística quedó afectada. Sara Moyano, presidenta de la Cámara de Turismo de Atacames, señaló que fue cancelado un 40% de reservaciones para el feriado de Navidad y Año Nuevo. Los turistas abandonaron ayer las playas.
Carlos Acosta, presidente de la Cámara Provincial de Turismo, dijo que evalúan cada hotel con el Ministerio de Turismo para tomar decisiones que podrían devenir en créditos para reactivar el sector.
Las continuas réplicas obligaron a la suspensión de clases, que serán reanudadas el 3 de enero, según Carmen Guagua, coordinadora del Ministerio de Educación, Zona 1.
Más energía liberada
El sismo de 5.7 grados se produjo por una nueva liberación de energía acumulada en una zona que ya se activó a inicios de este mes, por la presión que ejerció la falla del terremoto de abril en Pedernales.
Pese a ser un enjambre de sismos en un lugar distinto al del terremoto, sí son eventos relacionados. Así lo explicó Alexandra Alvarado, directora del Instituto Geofísico. “El 16 de abril se pudo haber activado o cargado de fuerza en esta región, que es una falla muy pequeña, pero capaz de generar sismos como los que estamos sintiendo en este mes”.
En esta zona se sintió un sismo de 5.1 el 12 de diciembre. Es una falla tectónica que podría seguir activándose en los próximos días o semanas. “Hay más energía acumulada que se liberará y luego se tranquilizará. Pero esto no es premonitor de un sismo grande”.
La preocupación actual, agregó, es que esta zona es potencialmente capaz de generar sismos grandes en el futuro. “¿Cuánto tiempo? No sabemos, pueden ser 10 años, 20 años, pero sí es próximo.
47 heridos dejó el sismo en Atacames