Detalles por el feriado de Carnaval se definirán en una reunión del COE de Atacames con todos los actores del turismo. Foto: cortesía
Los integrantes del Comité de Operaciones de Emergencia de Atacames están más preocupados por el impacto del invierno que del feriado de Carnaval, que podría ser una alternativa para la reactivación de la economía del sector turístico.
Las lluvias provocaron el desbordamiento del río Atacames, que afectó a las comunidades asentadas en las márgenes y se anegaron los cultivos. Un equipo de Gestión de Riesgo trabaja en el levantamiento de la información.
El alcalde de ese cantón, Freddy Saldarriaga, dijo que se ha pensado en organizar programas festivos por Carnaval, pero eso se resolverá el próximo miércoles 3 de febrero dle 2021; ahora se priorizan las emergencias provocadas por el invierno.
“Los detalles por el feriado se definirán en una reunión del COE de Atacames con todos los actores del turismo, una vez que evaluemos la situación invernal en todo el cantón”, señaló el alcalde.
La directora de Turismo del Municipio, Nancy Basurto, explicó que por ahora determinan un plan para recordar a los prestadores de servicios turísticos las medidas de bioseguridad en los negocios de la playa, que operan con el 50% de su capacidad de aforo.
El trabajo también implica volver a revisar la ordenanza para el uso de playa y prevenir las aglomeraciones, en una temporada alta como la de Carnaval.
El año pasado la asistencia fue satisfactoria (unos 40 000 turistas), de acuerdo con la Cámara de Turismo de Atacames, antes del inicio de la emergencia sanitaria por el covid-19.
El presidente de la Cámara de Turismo de Atacames, Eddy Gómez, explica que a puertas de un nuevo feriado nada se ha definido por algunos factores como el invierno, pero aclaró que las playas están abiertas sin ningún problema.
Entre las asociaciones de vendedores de comidas, cebiches, artesanías y personas que viven de la actividad turística existe preocupación, porque no hay ninguna programación para atraer a los turistas del país, señala Bárbara Quiñónez, integrante de una de las asociaciones de cebicheros de Atacames.
Luis Quiñónez, dueño de un hotel en Tonsupa, cree que debe esperarse hasta que se reúnan el COE cantonal y la Cámara de Turismo para saber qué hacer a puertas de un nuevo asueto, uno de los más importantes del año por su rentabilidad.
Quiñónez piensa que, de continuar el avance de la pandemia en la Sierra, el turismo del sur de la provincia de Esmeraldas se verá afectado porque mucha gente no querrá salir de sus ciudades para visitar las playas.
Hasta el momento, Atacames no registra aumento de casos de coronavirus y se han extremado los controles de bioseguridad en las unidades de transporte urbano, mercados, playa y en los hoteles, que reciben turistas los fines de semana.