Asamblea aprobó la Ley de Aguas

Finalmente se cumplió lo que todos esperaban: la amplia mayoría oficialista votó a favor de la Ley de Recursos Hídricos, que pondría fin a la vigente desde 1972, siempre y cuando el presidente Rafael Correa no lo vete total o parcialmente.

Con 103 votos a favor, 21 en contra y seis abstenciones, la Ley que contiene 160 artículos, cuatro disposiciones generales, 11disposiciones transitorias y 17 derogatorias.

En las afueras de la Asamblea, reinaba la confusión. Por una parte la tristeza de la Ley –pero con la promesa de seguir la lucha- y la algarabía del oficialismo que ya casi una hora luego de aprobada la Ley, seguían celebrando con el espectáculo musical que comenzó desde las 09:30.

El oficialismo consideró que esta Ley es democrática, incluyente, y que da lugar a una institucionalidad que será la superación del caos administrativo que persiste desde aquellos años. Además, Miguel Carvajal, sostuvo que esta Ley impide la privatización y obliga al Estado fortalecer a las juntas comunitarias del Agua. Pero la oposición, sobre todo desde Pachakutik y la Conaie, se considera que la ley permite la privatización.

Antes de  terminar el receso  e iniciar a votación por la Ley de Aguas. Jorge Herrera, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) mostró su desencanto, aunque reconoció que respecto a la que se estaba debatiendo en el 2010, hay avances sustantivos. Sin embargo, la Autoridad Única del Agua no dejaba de ser el problema de fondo de esta discusión. “Estamos de acuerdo que sea el Estado esa autoridad, pero nosotros también somos Estado”, dijo.

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