En el Centro Cultural Sono, ubicado en el Centro Histórico de Cuenca, entre el 24 y 26 de diciembre se realiza la Feria de Saberes y Conocimientos Ancestrales con la participación de 20 productores locales. Foto: Lineida Castillo / EL COMERCIO
Diciembre es la oportunidad para vender entre los pequeños artesanos cuencanos que no tienen un mercado donde ofertar lo que producen. Hay instituciones públicas y privadas que en esta época les abren las puertas al comercio.
En la Feria de Saberes y Conocimientos Ancestrales participan 20 productores locales. Foto: Lineida Castillo / EL COMERCIO
En el Centro Cultural Sono, ubicado en el Centro Histórico de Cuenca, en el sur del Ecuador, entre el 24 y 26 de diciembre se realiza la Feria de Saberes y Conocimientos Ancestrales con la participación de 20 productores locales.
Ellos ofrecen artesanías en lana como adornos navideños y prendas de vestir. También golosinas como chocolates, chispiolas, comida típica de la época y adornos en materiales reciclados. Pero también, entre ellos intercambian conocimientos sobre la elaboración y preparación de sus productos.
Como complemento, Sono ofrece música en vivo con artistas locales y del país y comida típica, para atraer a los visitantes. Blanca Dután, de 58 años, de la parroquia Gapal, oferta tejidos de gorras, bufandas, escarpines, chalinas… que los elabora con palillo y crochet.
Ella pertenece a la Asociación de Emprendedores San Antonio que agrupa a 20 socios de esa zona. Para Dután, este espacio le permite hacerse conocer y vender lo que produce en sus tiempos libres con ayuda de sus hijas.
Este 25 de diciembre del 2015, ella también compartía su habilidad y creatividad con Nilde Silva, de 55 años, quien también elabora prendas, pero utilizando herramientas como telares y agujas. En la feria habían accesorios para el cabello desde USD 1 hasta chalinas de 30.
Para Johanna Cruz, de Sono, la feria pretende incentivar el comercio en las familias que nunca han tenido oportunidad de vender lo que producen, y que tienen mucha experticia. Además, es una oportunidad para vivir y conocer técnicas ancestrales que mantienen los artesanos y que desarrollan durante la feria.
Por eso, Sono hace una feria mensual dirigida a esa población. En cambio, la cuencana María Rosa Sarmiento ofrece chocolates en diferentes presentaciones que elabora de forma artesanal. Además, mousse y helados de chocolate con maracuyá.
En estos días, Cuenca tiene amplia oferta de ferias navideñas en espacios públicos como parques, plazoletas y zonas colindantes a los mercados entre ellos en la calle del Artista, Nueve de Octubre, feria libre El Arenal, San Blas, María Auxiliadora…