Argentina pagó hoy, jueves 26 de junio, capital e intereses de vencimientos de deuda por USD 832 millones, de los cuales 539 millones fueron depositados en cuentas del Bank ok New York, a pesar del embargo potencial que pesa en esa jurisdicción.
Así lo informó el ministro de Economía, Axel Kicillof, durante una rueda de prensa, según la agencia estatal Telam.
“No pagar teniendo los recursos no está contemplado” , subrayó el ministro, quien ratificó “el firme compromiso” del país en honrar el 100% de sus deudas.
Kicillof agregó que “cualquier conducta que pretenda obstaculizar este pago a nuestros acreedores constituye una actitud violatoria del ordenamiento jurídico del derecho público internacional que prohíbe la coerción a otros Estados en virtud de la igualdad soberana, cláusula que también rige en los Estados Unidos” , resaltó el Ministro.
Kicillof leyó durante la rueda de prensa un texto oficial, redactado en lenguaje técnico-jurídico, según el cual Argentina decidió pagar los vencimientos de deuda correspondientes a los tenedores de bonos que entraron en los canjes de deuda 2005 y 2010, cuyo vencimiento original es el lunes próximo.
El ministro también anunció que los abogados de Argentina en Nueva York le volvieron a pedir al juez de primera instancia Thomas Griesa que suspenda la ejecución del fallo a favor de los acreedores del país que no aceptaron los canjes, luego de que el caso fuera desestimado por la Corte Suprema estadounidense.
El estado argentino, según el comunicado leído por Kicillof, pagó hoy debido a que es el último día hábil previo al vencimiento, ya que mañana es feriado en la administración pública argentina.
El comunicado también alude al apoyo internacional que está recibiendo argentina de países como Francia, México y Brasil, y del mecanismos de integración como el Mercosur, Unasur y el Grupo de los 77 más China.
El fallo de Griesa, que también fue confirmado en la apelación, condenó a Argentina a pagar el total de la deuda reclamada por bonistas que no entraron en el canje por USD 1 330 millones, y habilitó a que se embarguen activos argentinos en esa jurisdicción para cumplir el fallo, como los fondos que acaban de ser depositados.
Al mismo tiempo, Argentina y esos acreedores con fallo favorable están negociando en Nueva York el cumplimiento de la sentencia con los oficios de un mediador designado por el juez Griesa.