Andrés Robalino es Director ejecutivo Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca. Foto: Cortesía / Cámara de Industrias, Producción y Empleo de Cuenca
Entre los industriales cerámicos hay incertidumbre por la aprobación o no de la salvaguardia que solicitaron el 2019. ¿Tienen una respuesta oficial?
No tenemos un comunicado oficial. Pero el lunes (20 de julio de 2020) tuvimos una reunión con los viceministros del Ministerio de la Producción, Daniel Legarda, y Jackson Torres, quienes nos informaron que la solicitud de salvaguardia, que fue pedida por el sector de cerámica plana, no será aceptada ni aprobada. Nos indicaron que se podrían aplicar otras medidas, pero la situación del sector cerámico es grave, por lo que no son alternativas que beneficien.
¿Les informaron cuándo se formalizará esta decisión?
Nos indicaron que hubo una reunión del Comex en la que se tomó esta decisión, pero aún no hay nada oficial ni publicado. Además, existe una duda técnica porque de acuerdo con el articulado que sustenta la defensa comercial hay dos etapas para la aprobación o no de una salvaguardia. Según la Organización Mundial de Comercio, la primera es presentar un informe para una medida provisional, que se la puede aplicar durante la investigación. La segunda, en cambio, le sigue a la primera y es presentar un informe final para una salvaguardia permanente. De la información que nos dio el viceministro Legarda, no sabemos si es sobre la provisional o la definitiva. Esa duda ya fue consultada al Ministerio de Producción.
¿A ustedes les indicaron las razones para la negativa?
No. Lo único que nos indicaron es que existían muchas presiones de los países que se les iba a afectar con esta medida de protección. Pero, les informé que Colombia y Perú, que son los que más critican esta medida, van a implementar salvaguardias de textiles. La pregunta es por qué el Ecuador no apoya la industria nacional. No existe lógica.
¿Qué opciones les plantearon y por qué no les conviene?
Son dos, la una va dirigida al comercio exterior y la otra está relacionada con la calidad. La primera es implementar una medida de duda razonable que consiste en que el Gobierno ecuatoriano inicie una investigación porque existe una duda en el origen del producto importado. Con Colombia y Perú tenemos arancel cero, no así con China. Existe la posibilidad de que al mercado nacional llegue, por ejemplo, cerámica con marca peruana, pero que sea fabricada en China. No serviría porque controlaría a un porcentaje muy pequeño de importaciones, pero el desequilibrio en el mercado se mantendrá.
¿Y en el caso de calidad?
Es más completo y técnico de entenderle porque Ecuador no está acostumbrado a comprar por calidad sino por precio. Entonces ingresa productos que no cumplen con calidad y aunque existen institutos que deberían confirmarla y certificarla, ya que existen reglamentos técnicos, no lo están haciendo. El más afectado es el consumidor. En países como Colombia, Chile o México, que manejan bien este tema, el control se efectúa antes de la importación, pero en el Ecuador se lo hace cuando ya está en una percha.
Además, si el consumidor o competidor presenta una denuncia tiene que pagar la investigación y el análisis en el laboratorio y es muy costoso. La propuesta del Ministerio es realizar este control posterior, que no sirve de nada porque la divisa salió y se hace un muestreo del producto, pero el resto se sigue comercializando. Desde hace 12 años pedimos que los controles sean previos.
¿Cuál es la situación del sector en la actualidad?
Es difícil medirlo porue todas las actividades han tenido un decrecimiento. Es obvio que cuando las cosas vuelvan a la normalidad habrá un despuente de las importaciones. El efecto a la industria nacional será más complejo aún y se verá en los próximos meses. Entre enero de 2016 y abril de 2020 las importaciones crecieron un 217%, mientras que la industria nacional cayó un 9% en sus ventas y perdió 17% del mercado ecuatoriano. El Ministerio de Producción no quieren apoyar a la industria nacional.