Álex Puruncajas. Quito
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La segunda fórmula de ataque le dio mejores resultados al técnico Juan Manuel Llop. Antes del gol de la victoria, el rostro del técnico argentino de Barcelona evidenciaba angustia e inconformidad.
El estratega envió a la cancha ayer desde el inicio al goleador paraguayo Juan Manuel Samudio, rodeado por Vinicio Angulo y el mediocampista Luis Bolaños.
CURIOSIDADES
Luis el ‘Chucho’ Bolaños y Omar de Jesús eran los que más llamaban la atención en el campo de juego del Atahualpa. El mediocampista utilizó botines de color blanco y el lateral lució unos zapatos rojos.
Un grupo de hinchas golpeó a una persona que lanzó una botella al campo. Por eso, el árbitro Miguel Hidalgo detuvo el juego. El árbitro realizó una advertencia y, ahora, se espera su informe para determinar la gravedad del hecho y si es factible una sanción.
Eduardo Maruri, presidente de Barcelona, fue interceptado en las gradas del estadio. Pero el directivo esperó que la mayoría de periodistas llegaran al lugar para dar declaraciones.El ‘Chucho’ Bolaños, la mayoría de ocasiones por el sector izquierdo, era el más creativo del trío ofensivo. Con sus constantes incursiones por las bandas y sus pases en profundidad, creaba el juego ofensivo de los toreros. Su labor era complementada por el empeñoso volante Matías Oyola, por el sector derecho.
Así, los toreros que ayer jugaron su primer partido como locales en el estadio Atahualpa por la suspensión del Monumental Banco Pichincha, intentaban atacar a Olmedo para llegar al arco del golero Robinson Sánchez.
Sin embargo, Bolaños y Oyola jamás encontraban en el lugar preciso a Samudio, el goleador del equipo. El ariete guaraní tenía una acertada marca de Hernán Silva y Elvis Bone, los defensas centrales del club riobambeño.
Por eso, Bolaños empezó a ensayar remates de media distancia ante el arquero Sánchez.
Olmedo, en cambio, esperaba en su campo. Respaldado por unos 200 hinchas que ayer llegaron de Riobamba, el ‘Ciclón’ apelaba a la defensa como su mejor argumento y aguardaba el contraataque. Por eso, los guayaquileños se mostraban más ofensivos.
Así, Bolaños a los 24 minutos ensayó un remate, que el arquero Róbinson Sánchez evitó con dificultad. El golero dejó escapar la pelota, pero contó con el respaldo de su defensa Pedro Gámez.
Los centros al área adversaria y los ataques de los toreros se multiplicaban. Esa fórmula de ataque se repetía constantemente. Por eso, Bolaños volvió a probar a Sánchez desde fuera del área.
Sus tres remates, sin embargo, salieron desviados. Así, en la zona técnica, el técnico Llop se movía constantemente. Olmedo apenas respondió con un remate de Alejandro Banegas. El delantero se encontró solo frente al golero Máximo Banguera, pero se apresuró y su remate salió fuera del arco.
Por ello, el arquero Sánchez tenía intenso trabajo. Incluso, por evitar un gol se lastimó y debió ser reemplazado por Damián Lanza.
Los toreros insistían en su propuesta. Eso hasta que una falta de Omar Ledesma en contra del lateral Giovanny Nazareno, levantó de los asientos a la mayoritaria afición de Barcelona.
El árbitro Miguel Hidalgo decretó un tiro penal. La jugada fue polémica porque Nazareno fue trabado fuera del área. Aunque después volvió a ser impedido de llegar al arco en el área.
Tras esa jugada, los locales empezaron a observar a Samudio. El paraguayo tomó la pelota pero remató con tan mala fortuna, que su disparo salió sobre el horizontal.
A esa altura del cotejo, parecía que la estrategia defensiva de Olmedo era efectiva para frenar la ‘embestida’ torera.
Llop regresó a ver a la banca y pidió que llamen al delantero Juan Anangonó. El ariete se despojó del chaleco de los suplentes y reemplazó a Samudio. Antes de esa acción, el DT también había ordenado la salida de Angulo por Pablo Palacios, quien recibió los mayores aplausos de la afición en su ingreso al campo.
Aun así, Olmedo era efectivo con sus defensas liderados por Elvis Bone. El zaguero, junto a Díaz, suplían con éxito la ausencia del capitán Javier Caicedo.
Con todo, la jugada del gol llegó de una forma inesperada para los defensas. Oyola ejecutó un tiro libre, que fue aprovechado por Anangonó. El delantero se encontró la pelota en el área y concretó el gol salvador para los locales.
Olmedo no tuvo reacción y su entrenador argentino Claudio Otermín tampoco. Así, el equipo perdió por tercera ocasión y lleva cuatro encuentros sin ganar en el torneo. Ahora, está en el último lugar y las críticas sobre su entrenador crecen. Barcelona sumó 10 puntos, pero por gol diferencia cayó al segundo lugar.
La contrafigura
A Alejandro Banegas le faltó poder ofensivo
Inició como titular, pero fue reemplazado en la segunda etapa. A los 65 minutos, el técnico Ricardo Otermín lo reemplazó. El atacante desperdició una oportunidad de anotar ante el golero Máximo Banguera.
La figura
Matías Oyola desplegó fuerza y coraje
El mediocampista fue el jugador más empeñoso de los toreros. El volante desbordó constantemente por el sector derecho e izquierdo durante todo el partido. Además, complementó la tarea de los delanteros de su equipo.