El ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana (der.), participó ayer, 29 de junio de 2017, en un recorrido en Aliments S.A., en Durán. Foto: Mario Faustos/EL COMERCIO
El ministro de Comercio Exterior, Pablo Campana, anunció ayer, 29 de junio de 2017, que analiza subir el arancel de 400 productos importados en hasta cinco puntos porcentuales. La decisión tomó por sorpresa a parte del empresariado local.
De las 1 243 subpartidas que entraron en revisión luego de que se eliminaron las salvaguardias, cerca de 400 serán evaluadas “en términos de aranceles” por el Consejo Consultivo de Comercio Exterior, indicó ayer, 29 de junio de 2017, Campana.
“Si hay algún producto que hoy pague el 10% seguramente mañana pague el 15% de aranceles”, ejemplificó el funcionario.
Las 400 subpartidas (productos y grupos de productos) se relacionan con bienes de consumo, aclaró el Ministro y enfatizó que no incluyen materias primas ni bienes de capital. “Se analiza gravar aquellos (productos) que no afecten la economía popular y solidaria”.
El funcionario añadió que la medida, en todo caso, no va a impactar en la economía.
El anuncio genera preocupación en gremios como la Federación de Cámaras de Comercio. Para Patricio Alarcón, presidente de este gremio, la medida va a subir los costos de los productos de consumo.
Pese a que pueden ser solo cinco puntos porcentuales de aumento, el directivo cree que habrá un impacto negativo. “Es como si a esos sectores se los gravara con otro impuesto a la salida de divisas (ISD) del 5%, esa es la relación”.
Alarcón dijo que le extraña que esta medida no se haya consultado antes. “Recibimos esto con sorpresa y lamentamos que se quieran tomar decisiones sin consultarnos”.
Roberto Azpiazu, director ejecutivo del Comité Empresarial Ecuatoriano (CEE), rechazó un posible incremento del arancel porque esto significará encarecer más la economía del país. Lamentó que se estén cambiando las reglas del juego a cada momento.
Según Aspizu, esto sería volver a las políticas parches y “la actividad comercial no está para eso porque aún no se ha recuperado de un año recesivo como fue el 2016”.
El ministro Campana indicó que el objetivo de la medida será “fomentar la producción local y la exportación, y proteger los dólares en la economía ecuatoriana”.
Gremios como la Cámara de la Pequeña y Mediana Empresa de Pichincha (Capeipi) son partícipes de la imposición de aranceles para restringir las compras del exterior.
Esta agrupación presentó una propuesta al Ministerio de Comercio Exterior para que se apliquen medidas arancelarias a 1 500 productos; entre ellas están las 400 categorías bajo análisis del Ministerio.
Christian Cisneros, directos de la Capeipi, dijo que es una medida positiva para el país porque activa la producción e incrementa el número de ventas locales. Además, impide la salida de divisas y, por lo tanto, apoya la industria nacional.
Campana insistió en que un eventual aumento de aranceles a esas partidas “no va a restar competitividad al país sino que va a proteger a la industria ecuatoriana, a nuestros productos y principalmente la dolarización, que es algo que tanto el sector público como el privado se ha manifestado que debemos mantenerlo”.
El titular de Comercio Exterior dio estas declaraciones al finalizar un recorrido en la empresa Aliments S.A., ubicada en la vía Durán – Tambo, una de las tres compañías que visitó ayer, en Durán.
Allí también se refirió al Sistema General de Preferencias Arancelarias (SGP) que otorga Estados Unidos a Ecuador.
El funcionario sostuvo que ha mantenido reuniones sobre el tema con el embajador de ese país, Todd Chapman.
Dijo que hay el interés del Ecuador y la buena voluntad de los Estados Unidos de mantener ese sistema de preferencias. Anunció que en las próximas semana viajará a Washington y Nueva York para mantener reuniones encaminadas a mantener el SGP.
“Hay que mirar siempre estrategias que nos acerquen más a nuestro primer socio comercial”, señaló.