En Alluriquín, las autoridades identifican las zonas de riesgo para reubicar a los estudiantes en zonas seguras. Foto: EL COMERCIO
Un grupo de técnicos del Municipio inició una evaluación en Alluriquín, ubicada en el kilómetro 79 de la vía Alóag – Santo Domingo, en el occidente de Ecuador, para detectar los sitios vulnerables de la zona. Para ello desarrollan un censo que empezó en el sector de Unión del Toachi.
Ese poblado de la Unión del Toachi fue declarado, a través de la resolución No. SGR 042-2014, emitida 27 de junio de 2014, como zona de riesgo por la Secretaría de Gestión de Riesgos el año anterior debido a que se encontró una falla geológica.
Los primeros datos de ese sector y que coinciden con un estudio del Municipio de Santo Domingo determinaron que 115 familias del sector están en riesgo. Este 14 de abril de 2015, el censo se realiza en el centro poblado de Alluriquín donde se concentra la mayoría de habitantes. El barrio La Libertad es uno de los más afectados por los más de 100 derrumbes que se registraron en la vía desde el 19 de marzo de 2015.
De este censo dependerá que se reubique a los estudiantes de tres instituciones educativas de Alluriquín conocida como la ‘parroquia dulce’. Si se cumpliera la reubicación, el Ministerio de Educación deberá emprender un plan de contingencia para que los maestros y estudiantes se les asigne un plantel educativo.
Además se debe gestionar la movilización hasta Santo Domingo. “Sin un censo no se pueden tomar decisiones. Debemos tener informes técnicos e información en tiempo real para informar a la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos y que se tome una decisión en pro de la seguridad de las personas”.
En los días siguientes se trabajará en los recintos y asentamientos como El Paraíso y Lelia. Según la Gobernación de Santo Domingo, alrededor de 300 personas quedaron damnificadas en esos sectores. Para ayudar a estas personas se han realizado varias cruzadas.
Según la directora provincial de Cultura, Mayra Álava, se emprendió un proyecto denominado ‘Todos Somos Alluriquín’ en apoyo a los comerciantes de esta parroquia, quienes se afectaron por el cierre de 21 días de la vía Alóag-Santo Domingo.
Este proyecto consiste en colocar estands con los productos elaborados en la ‘tierra dulce’ como melcochas, dulces de guayaba, maní, entre otros. Estos puestos se ubican en las afueras de las instituciones públicas que tienen mayor afluencia de ciudadanos como el Servicio de Rentas Internas (SRI), Banco del Fomento y la Corporación Nacional de Telecomunicaciones.
El Consejo de la Judicatura de Santo Domingo también entregó vituallas a los afectados del asentamiento Lelia. Las ocho familias damnificadas de ese sector recibieron camas, colchones, enseres de cocina, víveres, sábanas, edredones, vajillas y más artículos.