El presidente Rafael Correa anunció que asistirán más de 5 000 personas. Foto: Flickr / Presidencia de la República del Ecuador
Este lunes, 1 de mayo del 2017, las autoridades del Movimiento Alianza País (AP) se reunirán en el Coliseo California de Portoviejo, en Manabí. Se realizará la VI Convención Nacional de la organización, con el objetivo principal de elegir a la nueva directiva nacional.
Según la convocatoria, asistirán las autoridades nacionales del movimiento; directores provinciales, cantonales, parroquiales y por las circunscripciones del exterior; miembros de las secretarías y comisiones provinciales; autoridades de los gobiernos provinciales (prefectos, viceprefectos, alcaldes, concejales y presidentes de las juntas parroquiales); asambleístas y parlamentarios andinos, principales y suplentes (salientes y electos); delegados en proporción al número de afiliados en cada provincia y de las circunscripción del exterior.
El presidente Rafael Correa anunció que asistirán más de 5 000 personas. Incluso, por eso se decidió cambiar el lugar ya que en un inicio se había buscado realizarlo en Manta, pero no se encontró un local apropiado.
Además, el Mandatario anunció que propondrá a la convención reformas al Código de Ética del Movimiento con el fin de “endurecerlo”. Se tomará como ejemplo -dijo- el reglamento de Podemos, movimiento político español.
Dijo que se tomará en cuenta lo que dice este documento respecto a la utilización de vehículos oficiales por parte de los funcionarios de altos cargos que pertenezcan a AP.
El código de Podemos establece: “La renuncia por parte de las personas titulares de altos cargos, a la asignación de un vehículo oficial de carácter permanente excepto cuando los Cuerpos y Fuerzas de seguridad del Estado así lo recomienden”.
“Es obvio que el presidente, el vicepresidente y los ministros tienen que tener vehículos oficiales por temas de seguridad. Pero, ¿el gerente de una empresa pública?… Lo primero que hacen es dónde está mi vehículo y se ha luchado ante esas cosas”, dijo Correa durante su último enlace ciudadano.
Incluso -agregó- actualmente en el despacho presidencial hay transporte público para todo el mundo y no es una obligación del empleador. Cree que se puede instalar un servicio de transporte que sea pagado por los propios funcionarios.
El orden del día para la convocatoria tiene siete puntos. Primero, la instalación; la designación de la Presidencia de la Convención Nacional; la evaluación de los resultados electorales y del momento político; el informe y rendición de cuentas a cargo de la dirección nacional saliente.
El quinto punto es la elección de dignidades. Se elegirá presidente, vicepresidentes, secretario ejecutivo, titulares de las comisiones de Ética, Electoral y de Defensa del Adherente.
Correa indicó que espera que se mantenga la tradición y que el presidente y primer vicepresidente del movimiento sean quienes también ostentan las primeras magistraturas en el país. En este caso, los electos Lenín Moreno y Jorge Glas.
La segunda vicepresidencia todavía no se ha confirmado. Pero, está abierta la posibilidad para Ricardo Patiño, actual ministro de Defensa. El político asegura que no formará parte del gabinete ministerial de Moreno y que se dedicará a la dirigencia política del movimiento.
Mientras que para la secretaría ejecutiva se mocionará a Gabriela Rivadeneira, actual presidenta de la Asamblea y reelecta como legisladora para el próximo período. Aunque Correa anunció que primero deberán analizar la parte legal y estatutaria para saber si debe renunciar a su curul.
En los puntos finales de la convención se analizará la estrategia política que Alianza País adoptará para el nuevo período administrativo y se realizará el cierre de la convención. Antes del encuentro, los dirigentes oficialistas participarán de una marcha por el Día del Trabajo en el centro de Portoviejo.
Uno de los primeros en llegar a Manabí fue el vicepresidente Jorge Glas. El segundo mandatario arribó el sábado 29 de abril. Participó en el cierre de los albergues de Cojimíes y Divino Niño en Pedernales, que se instalaron tras el terremoto del 16 de abril para acoger a las familias damnificadas.
“Esto ya es un recuerdo, porque ahora Manabí está de pie”, expresó mientras ayudaba a desarmar una de las pocas carpas que aún quedaban en el sitio. Luego, el Vicepresidente acudió a la urbanización Ciudad Jardín, para la entrega oficial de las primeras 100 viviendas, de las 368 que tendrá este proyecto.