Pocos quiteños saben que existen 36 especies de plantas nombradas en honor a Quito, como por ejemplo la Mimosa quitensis, el ‘algarrobo de Quito’. Esta es una planta endémica de la zona y es muy decorativa, explica el ingeniero Carlos Ruales, profesor de la Universidad San Francisco de Quito.
Esta Mimosa quitensis es una planta muy robusta, que resiste muy bien los cambios de clima inesperados que tiene el territorio ecuatoriano, así como los rigurosos inviernos y secos veranos que tiene el país.
Es muy fácil sembrarla y cuidarla. Se puede sembrar por semillas o esquejes y el único requisito es que el suelo sea rico en materia orgánica.