Tras el ajuste salarial, los montos de multas y otros rubros aumentan, en base al Salario Básico Unificado (SBU). Foto: Archivo/ EL COMERCIO
Con el incremento del salario básico unificado (SBU) se ajustan también las tarifas de multas y pagos por temas vinculados a tránsito, ordenanzas municipales, costas judiciales, regulaciones laborales y de la seguridad social, entre otras.
El pasado 19 de diciembre el Consejo Nacional de Trabajo y Salarios (CNTS) llegó a un acuerdo con relación al alza salarial del 2017. Tras 16 años de falta de consensos, los representantes de empleadores y empleados definieron un aumento de 2,46% con lo que el nuevo SBU pasará de USD 366 a 375 a partir de enero del 2017.
Este incremento, de acuerdo al ministro de Trabajo, Leonardo Berrezueta, beneficiará a un total de 400 000 personas a escala nacional. El resto de trabajadores tienen sueldos superiores y, sobre ellos, no se aplica el aumento.
Iván Nolivos, abogado laboral, explicó que las tarifas de multas, costas judiciales y otras se indexan al salario básico por funcionalidad. “Es meramente referencial, para que el incremento sea automático cada año. Así no hay necesidad de estar poniendo montos cada 12 meses”.
Con esto se evita que las entidades del Estado tengan que hacer reformas jurídicas para, por ejemplo, incrementar una multa o pagar tasas. Así, el Código de Trabajo fija sanciones pecuniarias para diferentes infracciones de entre tres y 20 SBU.
El monto del básico también definirá el pago del décimo cuarto sueldo (completo o mensual), o el valor de la multa a pagar por no sufragar y por no acudir como integrante a la junta electoral, que es del 10% y 15% del básico, respectivamente.
Otro aspecto a tomar en cuenta es que suben los sueldos de las trabajadoras remuneradas del hogar, que está fijado en un SBU. Maritza Zambrano, representante del Sindicato Nacional Único de Trabajadores, que aglutina a unas 600 personas, celebró el incremento salarial acordado. “Es positivo que haya un alza. Esto va a ayudar a las personas dedicadas a esta actividad”.
Nolivos aclaró que hay algunas leyes antiguas que no han sido actualizadas y en las cuales sigue constando como referencial el salario mínimo vital, que era un concepto que se usaba antes de la dolarización.
Considera que se debe ajustar la redacción de los textos para que se aplique la frase SBU, que es la que actúa como base para cualquier ajuste en la actualidad.
El martes los representantes del Frente Unitario de Trabajadores (FUT) indicaron que es necesaria una Ley de Salarios, que defina todos los aspectos vinculados a este rubro.
Los trabajadores de esta central sindical se mostraron inconformes con el ajuste salarial realizado, que es el más bajo de los últimos 10 años.
En la última década, que es el tiempo que lleva en el poder este Gobierno, el SBU creció en un 128,7%, según estadísticas del Banco Central del Ecuador (BCE).
Desde el 2006 hasta el 2014 las alzas salariales estuvieron en el orden del 9 y 10%. Sin embargo, la desaceleración de la economía a partir del 2015 marcó la diferencia. El año pasado el aumento del básico fue del 4,11% y más baja todavía (3,39%) para el 2016.