Redacción Manta
Las olas eran visibles, ayer, desde los vehículos que circulaban por la vía Puerto-Aeropuerto, en Manta. Desde el pasado fin de semana, el mar choca con fuerza en el muro de piedra escollera que protege a esa carretera.
El Instituto Oceanográfico de la Armada (Inocar) anunció que los aguajes seguirán hasta hoy. Por eso, los habitantes, que tienen sus viviendas cerca al mar, en los 350 km de playa de Manabí, han puesto a buen recaudo sus pertenencias.
Sobre las alertas
Las banderas blancas son el símbolo de que las aguas están tranquilas y que se puede nadar sin temor en el mar.
La presencia de la bandera naranja en la playa es señal de prevención. Es decir, no es adecuado meterse al agua.
El listón rojo señal que el bañista no puede estar en la playa. Esta es la indicación de máximo peligro por los oleajes. Cuando vea esta bandera, no ingrese al mar.María Zambrano trabaja en un restaurante en el Parque del Marisco, en la playa de Tarqui, en el noroeste de Manta. “La última vez que vi el mar tan bravo fue hace 11 años”. Los oleajes del pasado fin de semana causaron que el mar ingrese hasta su local.
Las estructuras de otros cuatro locales quedaron maltrechas. Los electrodomésticos de cinco restaurantes, ubicados en la misma zona, fueron llevados a las partes altas, para evitar que se afecten por la fuerza del mar.
En las playas más visitadas, desde Pedernales por el norte hasta Ayampe en el sur, los operadores turísticos mantienen informados a los visitantes.
“Hay que explicarles, especialmente a los turistas de otras provincias. El oleaje es muy fuerte”, comentó Manuel Cedeño, microempresario del cantón San Vicente, ubicado en el norte de la provincia.
Las consecuencias de los aguajes, en lo que van del año, han sido mortales. Jeovanny Rodríguez (23 años) murió el último domingo en la zona de la Boca de Crucita. Allí desemboca el río Portoviejo. El joven acudió ante el llamado de auxilio de su enamorada. Nadó hacia donde ella se estaba ahogando y la salvó. Mientras regresaba, una ola lo mandó al fondo y murió. Rodríguez era de Guayaquil.
Hace 15 días, otro bañista, también de Guayaquil, pereció ahogado en Manta. El capitán del puerto manabita, Patricio Mora, pidió a los turistas y miembros de las entidades de auxilio estar atentos a los anuncios que realiza el Inocar, sobre el comportamiento del mar.
El jefe del Cuerpo de Bomberos de Manta, Sofonías Rezavala, indicó que desde la presente semana, los 17 salvavidas que prestan su servicio voluntario en las playas urbanas y rurales del cantón trabajarán en el tema de las alertas a los turistas. “Si es posible, con megáfono en mano, ellos recorrerán las playas. La idea es prevenir y no perder más vidas”.