En las últimas horas, los muertos por el bombardeo, que se registró en Kunduz, en el norte de Afganistán se incrementaron a nueve. El ataque que se registró a las 02:10 (hora local) de este sábado, 3 de octubre del 2015, también dejo 37 heridos de gravedad.
Según el portal web de la ONG Médicos sin Fronteras (MSF), uno de sus hospitales resultó afectado por el bombardeo, que hasta el momento se le atribuye a las fuerzas aéreas de Estados Unidos.
Además, la organización condenó el ataque que duró más de 30 minutos y señaló que el hospital estaba “completamente lleno de personal y pacientes”. Exigen que se aclare con exactitud lo sucedido.
En tanto, los heridos más graves fueron trasladados a un hospital de Puli Khumri ubicado a dos horas de distancia, mientras que personal de la misma ONG continúa buscando a las decenas de desaparecidos y extraviados.
Ghilhem Molinie, representante de esa organización, declaró a EL PAÍS de España que el centro que fue destruido atendió a 400 pacientes desde el inicio de los combates el pasado lunes.
En total, durante el bombardeo estuvieron 105 personas en el interior y 80 trabajadores extranjeros.
El portavoz del Ministerio del Interior afgano, Seddiq Seddiqi, señaló que el bombardeo en el hospital se habría originado luego de que “entre 10 y 15 talibanes” habían entrado a refugiarse en la casa de salud. Sin embargo, los convenios internacionales prohíben atacar a centros sanitarios.