El ministro nipón de Finanzas, Taro Aso (quinto izq.), el gobernador del Banco de Japón, Haruhiko Kuroda (segundo der.), el ministro galo de Finanzas, Michel Sapin (der.), la directora del Fondo Monetario Internacional, Christine Lagarde (cuarto, der.), y el presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi (segundo der.), entre otros, durante una ceremonia de bienvenida en Sendai, prefectura de Miyagi, norte de Japón. EFE
Los ministros de finanzas del G7 se comprometieron a
“reforzar la lucha mundial contra la financiación del terrorismo”, a través de un plan de acción publicado este sábado 21 de mayo del 2016 al término de una reunión de dos días en Japón.
El grupo de los siete países más industrializados “reafirma su compromiso de combatir la financiación del terrorismo, que ofrece a los terroristas los medios de cometer sus ataques, alimentar sus redes y difundir su ideología a través de la propaganda”, destaca el documento publicado tras el encuentro.
“Ahora estamos en una fase operacional. Vamos a presentar herramientas eficaces de lucha contra la financiación del terrorismo, es absolutamente necesario”, declaró a la AFP el ministro francés de Finanzas, Michel Sapin.
Dicho mecanismo incluye “intercambiar información entre los organismos de inteligencia en el ámbito financiero, de forma que lo que pasa en un país se conozca en el país de al lado. Y eso para luchar contra los grandes movimientos de financiación, como por ejemplo el grupo Estado Islámico en Siria o Irak“, explicó.
Sobre ese punto, “el G7 se apoyará en el trabajo de organizaciones internacionales competentes, para identificar, analizar y evaluar los márgenes de progresión, y avanzar hacia propuestas concretas con las que corregir eventuales vulnerabilidades “, según el plan de acción.
Los países del G7 se comprometen también a colaborar mejor en la aplicación de sanciones financieras, como la congelación de cuentas bancarias, y a reforzar el GAFI, el grupo de acción financiera contra el blanqueo de capitales.
“Hay que luchar contra el anonimato, de las cartas de prepago pero anónimas, de los movimientos de dinero en efecto que permiten financiar de forma anónima. Tiene que haber huellas”, destacó Sapin.