Efraín Soria y Javier Benalcázar caminan hacia la Corte Constitucional. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
Sostienen una bandera de colores y gritan en favor de la igualdad de derechos para las parejas del mismo sexo. Hasta los exteriores de la Corte Constitucional llegaron activistas Lgbti y más representantes de colectivos que luchan porque en Ecuador se apruebe el matrimonio civil igualitario.
Hoy, martes 4 de junio del 2019, se espera la respuesta a la consulta de norma que la Corte de Justicia de Pichincha hiciera a la Corte Constitucional. Deben responder si la Opinión Consultiva 24/17 de la CIDH es vinculante en Ecuador. En ella se establecen derechos como el matrimonio para la población Lgbti.
Si la opinión consultiva es vinculante en Ecuador, el matrimonio civil entre parejas del mismo sexo sería posible sin necesidad de reformar la Constitución o la Ley Orgánica de Identidad y Datos Civiles.
Dos activistas sostienen una bandera Lgbti en los exteriores de la Corte Constitucional. Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
Efraín Soria y Javier Benalcázar, la pareja gay por la que inició este nuevo proceso de la comunidad Lgbti, llegaron esta mañana a la Corte para esperar los resultados de la sesión ordinaria del Pleno. Contaron que, de darse un resultado favorable, se casarán de inmediato.
“Esperamos que la Corte Constitucional apruebe los matrimonios entre personas del mismo sexo y que el Ecuador pase a la historia como un país de derechos”, dijo Efraín, quien acudió a la Corte junto a Javier, su pareja.
Al sitio también llegó la activista que inició la lucha por el matrimonio civil igualitario en el 2013. Pamela Troya, quien intentó casarse con su pareja Gabriela Correa, espera que esta oportunidad marque un hito para que todas las parejas del mismo sexo que deseen casarse puedan hacerlo. Si hoy la respuesta es negativa, asegura que la lucha continúa y que “habrá matrimonio igualitario, solo tendremos que esperar más tiempo”.
Foto: Patricio Terán / EL COMERCIO
En las redes sociales también se han pronunciado este día, grupos en contra del matrimonio igualitario. Son parte de la Coordinadora Nacional de Movimientos Vida y Familia, dirigida por Amparo Medina y Carlos Arsenio Larco. Ellos reiteran que la Constitución no debe ser reformada, por la Opinión Consultiva.
“La Constitución de la República, aprobada mediante referéndum por el pueblo ecuatoriano, estableció al matrimonio como una prerrogativa y derecho constitucionalmente reservado para una pareja hombre/mujer, pues esto respeta uno de los fundamentos esenciales del núcleo de formación de la sociedad ecuatoriana y la estructura de valores de la casi totalidad de ecuatorianos”.