Redacción Quito
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La aplicación del pico y placa está prevista para fines de abril, pero aún no se anuncia el día exacto. El alcalde Augusto Barrera dijo que la fecha para el inicio de la restricción vehicular depende de factores ajenos al Municipio.
Barrera se refirió al proceso de capacitación de los 150 policías que estarán a cargo del control. Otro problema es la falta de cumplimiento en la entrega de placas por parte de la Comisión Nacional de Tránsito (CNT).
El vocero de la Dirección Nacional de Tránsito, Juan Zapata, explicó que la ausencia de placas en los vehículos afectaría directamente a la medida restrictiva porque dificulta el control.
Por eso, el Municipio anunció que pedirá un plazo a la CNT para solucionar el déficit de placas. Una de las alternativas es la entrega de placas provisionales que consiste en la impresión de la serie en una hoja de papel.
Sin embargo, Barrera dijo que esos inconvenientes no serán un pretexto para aplazar la aplicación de la medida, que se vino anunciando desde enero. Por eso, esta semana el Cabildo iniciará un proceso intensivo de comunicación sobre la restricción.
Pero Guillermo Abad, de Justicia Vial, cree que la aplicación del pico y placa fue apresurada y que la norma no tuvo un proceso de consulta a los ciudadanos. Abad aseguró que primero se debían ejecutar otras medidas para mejorar el tránsito. Se refirió a la organización del transporte público, a la regulación de los semáforos y a otras obras de infraestructura vial.
El secretario de Movilidad, Carlos Páez, explicó que esas y otras medidas están contempladas en el plan de movilidad y que se aplicarán conjuntamente con el pico y placa. “El plan apunta a mejorar las condiciones del tránsito para el conjunto de usuarios de las vías”.
Según Patricio Ubidia, presidente de la Comisión de Movilidad del Municipio, el pico y placa tiene un 75% de aprobación entre los quiteños. Una de ellas es Karina Gallegos, de la Asociación de Peatones, quien incluso cree que la restricción vehicular debe ser más drástica.
Frente a la posibilidad de un incremento del parque automotor con la restricción, Páez aseguró que ese es un miedo poco real. Esto porque, según él, las familias de los estratos medio y altos ya tienen más de un carro y el resto de la población mantendría sus medios de movilización. Por eso, el Cabildo incluyó a las motos en el programa restrictivo. “Las motos reciben el mismo trato que el resto de vehículos”.
El funcionario explicó que el principal impacto será para los usuarios del transporte público por el incremento de las velocidades de operación. Las personas que dejen sus carros también incrementará la demanda en el transporte público.
Jorge Calderón, de la Federación de Taxis de Quito, aseguró que para cubrir esa demanda hace falta que las cooperativas de taxis amarillos incorporen al menos otras 1 000 unidades.
Para mejorar la seguridad y el servicio, el transportista dijo que cada cooperativa debe iniciar un proceso de reglamentación y sanciones a los conductores que presten un mal servicio.
La Policía de Tránsito también reforzará el control en cuanto al exceso de pasajeros en el transporte público y privado. Pero Cristóbal Buendía, del Observatorio de Movilidad, cree que si el control se aplica de manera coyuntural, la medida fracasará.
El experto, además, asegura que existen siete violaciones de carácter constitucional en la Ordenanza que regulará el pico y placa. “En la Constitución se dice
que nadie puede ser sancionado por una acción que no esté tipificada en una Ley”.
La reforma a la Ordenanza 247 fue aprobada en segundo debate del Concejo Metropolitano.
Lo que está
5 000 choferes y ayudantes de buses se capacitarán en el “Buen trato” y respeto a la Ley de tránsito.
El 3 de marzo se inició el proceso de capacitación de 150 policías asignados para el control del pico y placa.
La primera etapa de la campaña de comunicación con temas educativos y en valores se inició en febrero.
El Alcalde se reunió con representantes de los centros comerciales, universidades, bancos y el sector público para coordinar acciones para mejorar la movilidad en la ciudad.
Lo que falta
Desde el 4 de marzo hay un plazo de 30 días para que el Alcalde apruebe y ejecute el Reglamento a la reforma de la Ordenanza 247.
Esta semana está prevista una nueva fase de campaña de socialización que dará a conocer en detalle las horas pico, el número de placas y el control.
Esta semana está prevista la finalización del proceso de capacitación de los 150 policías de tránsito.
Aún no se conocen los acuerdos entre el Municipio y los sectores económicos, académicos y laborales para mejorar la movilidad.
La Comisión de Tránsito aún no fija la cantidad ni la fecha de entrega de placas.
Los pro
Se propicia el uso de transporte público y taxis, evitando la circulación con bajos niveles de ocupación en el transporte público.
Disminuye la circulación de vehículos livianos y regula el crecimiento del parque automotor, calculado en 30 000 carros por año.
Disminuye la conflictividad por la demanda de sitios de estacionamiento en las zonas de mayor concentración de viajes.
Se prevé que el incremento de la velocidad de circulación sería del 8% en las horas de mayor tránsito.
La reducción de la contaminación ambiental por los vehículos se reduciría en un 2,36% cada día.
Los contra
Potencial aumento de viajes en los vehículos habilitados para circular y un posible incremento del parque vehicular.
La restricción puede inducir al robo y falsificación de placas. Según la Policía, este es un delito penal.
Puede ser un incentivo para generar servicios de transporte de pasajeros que operen ilegalmente.
El retraso en la integración del sistema de transporte municipal y una limitada cobertura y deficiente calidad del servicio de transporte público.
Se mantendrá la concentración de destinos y de viajes hacia el hipercentro de la ciudad.