Abdalá Bucaram anunció que demandará al Estado ecuatoriano el próximo 26 de octubre en la CIDH. Foto: Mario Faustos/El Comercio
Será la primera vez que el expresidente de la República, Abdalá Bucaram Ortiz, llegue a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), luego de su destitución en 1997. El pasado sábado (3 de octubre) informó a través de su red social en Twitter, que visitará Washington para demandar al Estado ecuatoriano el próximo 26 de octubre.
Hoy, lunes 5 de octubre, el líder del eliminado Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE), se enlazó virtualmente para dar otros detalles de su decisión. Desde su departamento en ciudad de Panamá, dijo que tiene todos los argumentos para presentarse ante la Corte. Por ejemplo, que fue cesado de la Presidencia sin un juicio previo.
Por las condiciones en las que fue destituido, la demanda también será en contra del expresidente de la Corte Suprema de Justicia (1997), Carlos Solózano Constantine, quien dictó orden de prisión preventiva en su contra. Y de 44 exdiputados de su Gobierno que apoyaron la destitución, entre ellos el expresidente del Congreso Nacional y posterior presidente de la República, Fabián Alarcón (febrero 1997-agosto 1998).
Según Bucaram Ortiz, él se encuentra en un “total estado de indefensión”, y hasta el presente, carece de amparos constitucionales. Comparó su caso con el del exvicepresidente Alberto Dahik a quien el Estado le levantó la orden de prisión preventiva en 2011 y ahora vive en el país. “La misma nulidad del proceso ocurrió con Gustavo Noboa, sin embargo conmigo no lo hicieron porque no tuve un juicio político”, afirmó Bucaram.
La demanda ante la CIDH la hará a las 11:00 (hora de EE UU), acompañado de algunos partidarios y familiares. Su hijo, y líder del movimiento Fuerza Ecuador (FE) que recientemente fue aprobada la inscripción al Consejo Nacional Electoral (CNE), dijo que irá a Washington con el único objetivo de “que se respeten los derechos humanos por encima de los derechos políticos” de su padre.
El presidente Abdalá Bucaram fue destituido de la Presidencia el 7 de febrero de 1997, debido a que el Congreso lo consideró “incapaz” de gobernar. Sobre él pesó dos juicios; uno por malversación de fondos públicos y por irregularidades en el caso Mochila Escolar.