La Paz. Reuters
La autoridad electoral de Bolivia anunció ayer que los 5,13 millones de ciudadanos inscritos en el padrón, entre ellos 400 000 ‘observados’, podrán votar el domingo 6.
En estos comicios, el presidente Evo Morales buscará renovar su mandato por cinco años. El anuncio puso fin a una de las últimas polémicas previas a una votación de la cual, según casi todas las encuestas, el indígena izquierdista surgiría como el primer presidente en ejercicio en ganar la reelección inmediata en la breve historia democrática del país.
La cifra definitiva de votantes estuvo en duda la última semana, por una resolución de la Corte Nacional Electoral (CNE), criticada por el Gobierno, que condicionó la participación de 400 000 ciudadanos a que presenten certificados de nacimiento, documentos no exigidos previamente.
“Los ciudadanos todavía observados podrán votar el domingo, pero deberán regularizar sus documentos antes de la siguiente elección”, dijo el presidente de la CNE, Antonio Costas. Este anunció que el organismo decidió el martes autorizar la votación de todos los inscritos. Costas agregó que la CNE “no decidió bajo presión”, en referencia a las protestas del Gobierno y de ciudadanos amenazados con la exclusión del proceso electoral. La resolución finalmente quedó sin efecto.
Por su lado, Morales dijo que “la Corte Electoral corrigió y esto está terminado. Se había equivocado pero, en vez de perjudicar, como parece que pretendía, ha fortalecido a la democracia por la respuesta de la ciudadanía”.
El Centro Carter de Estados Unidos, acreditado como observador, pidió a su vez que la Corte “informe del procesamiento de datos para elaborar el padrón”.