En marzo, 3 000 profesores empezarán el primer módulo del plan de capacitación estructurado para el magisterio fiscal. Es un ambicioso programa que en este año incluirá al 50% de la planta fiscal, es decir a 72 008 de alrededor de 140 000.
En la primera fase recibirán 120 horas de inducción a cargo de la Multiversidad Édgar Morín, con sede en México. De modo semipresencial, los docentes tendrán una actualización pedagógica, conocerán sobre el rol del nuevo maestro, de las distintas inteligencias, del currículo… Los 45 269 profesores, que el Min. de Educación planea que ingresen al sistema público este año, deberán contar con esta preparación.
El segundo módulo se desarrollará a través de convenios con universidades de las categorías A y B del Ecuador.
En esta etapa, por ejemplo, un profesor de matemáticas deberá actualizarse 120 horas en conocimientos específicos.
En septiembre, la capacitación será más profunda. Habrá la posibilidad de escoger entre dos especializaciones: Pedagogía, para 6 169 profesores y Educación Inicial, para 10 235, que serán transferidos de la Educación General Básica (EGB) a los preescolares, tras pasar pruebas de aptitud.
Esto porque existe un déficit de maestros de Educación Inicial: hacen falta 17 159. Y hay un excedente de docentes en EGB, pues son 21 200 demás (de primero a séptimo de básica).
Quienes sean incluidos trabajarán con dos universidades, la Nacional de Educación (UNAE) y otra internacional.
Escogerán entre 30 centros iberoamericanos como la Complutense de Madrid, Autónoma de Barcelona, etc.
Los docentes podrán utilizar una de las ocho horas diarias de trabajo. Pero deberán asistir a la capacitación presencial durante sus vacaciones.
“En el 2013 tuvimos cero capacitaciones. Nunca pudimos inscribirnos”, comentó Mayra Castañeda, parvularia auxiliar del Centro de Educación Inicial Raquel Verdesoto, en la Ciudadela México. Se refiere a las ofertas del Siprofe, programa vigente desde el 2008.
En cada convocatoria solía haber espacio para 20 000 docentes. Ella se queja porque los cupos para los cursos eran limitados, había que inscribirse a través de la web. Y la página no siempre estaba disponible.
Por eso le suena interesante la propuesta. No le importaría estudiar en su tiempo libre. Cree necesario que los profesores se capaciten, incluso para cumplir con el nuevo perfil.
Quisiera tener más información sobre las clases, admite que hay un grupo de profesores que está por jubilarse y no querrá ser parte de la capacitación.
Ella no conocía sobre el plan a través del cual hasta mayo del 2015, todo el magisterio tendrá una portátil e Internet.
Este año, el Ministerio invertirá USD 140 835 748 en el plan de capacitación. Y según su titular, Augusto Espinosa, no se ha necesitado más presupuesto, se ha hecho “reingeniería financiera al optimizar recursos, en gastos de papel…”.
Manifestó, además, que la planta a escala nacional de la Cartera será de 10 000 funcionarios, ahora son 12 000 y ya han salido 3 000, más que nada de las viejas direcciones provinciales.
Desde el 2015 al 2017, el presupuesto de educación continua será de USD 100 millones. En el programa de especialización participarán 20 790 docentes cada año. El gran objetivo es que el universo de docentes hasta el 2017 haya cursado un programa de posgrado.
Pero ni la posibilidad de que más de 60 000 docentes sean parte de programas de especialización en tres años llama la atención a la Unión Nacional de Educadores (UNE). Han ha revisado la propuesta, según su presidenta, Rosana Palacios.
“No nos capacitaron en siete años de Gobierno”, dijo, y repitió que su gremio quiere que se validen las capacitaciones que ellos desarrollan.
Espinosa recalcó que era complicado capacitar a una planta docente que estaba por jubilarse. También recordó que había un concurso abierto. En abril se conocerán los resultados del Quiero Ser Maestro y los nuevos docentes serán los primeros en asistir a clases.
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