Un grupo tsáchila le puso música a su tradición

Juan Carlos Pérez / EL COMERCIO


Juan Carlos Pérez / EL COMERCIO


El conjunto musical Bonkoro Tenka ha encontrado una manera de mantener su identidad lingüística: cantar en tsáfiqui cumbias, sanjuanitos, paseítos y merengues.

Tsáfiqui es el idioma ancestral de la nacionalidad Tsáchila de Santo Domingo. Durante sus presentaciones en fiestas de su etnia, los integrantes de la agrupación lucen el cabello pintado con achiote mientras que las mujeres llevan su colorida tunán (falda).

Francisco Aguavil, solista de la banda, explica que su fascinación por la música surgió cuando descubrió que podía utilizarla como un medio para transmitir los cuentos de sus abuelos sobre el pasado. Precisamente la canción Bonkoro se inspira en esa vivencia.

Hace 11 años, la abuela de Aguavil, Catalina Calazacón, le contó que en el cerro Bombolí existían las aves bonkoro, que eran muy apetecidas para la dieta de los tsáchilas. Ella se lamentaba porque los pájaros desaparecieron cuando los alrededores de la loma se poblaron. Es que los bonkoro servían para preparar uno de los platos típicos de la etnia.

De ahí que Aguavil quiso hacer un homenaje a la narración de su abuela, en una suerte de denuncia por medio de la música. El intérprete dice que la idea de las canciones es recordar las tradiciones y costumbres de los adultos mayores tsáchilas.

Cuando Bonkoro Tenka se presenta en las siete comunas, los nativos se ponen nostálgicos porque escuchan sobre las cosas que antes existían en su territorio. Esta revisión del pasado habla de la abundante flora y fauna y los cristalinos ríos que en el presente están amenazados por la acción del hombre.

El vocalista de la agrupación incursionó en la música al ver a su abuelo José Jacinto Aguavil tocar la marimba. Entonces se le vino la idea de crear a una agrupación, que hoy se llama Bonkoro Tenka.

Este grupo tiene tres años interpretando música en tsáfiqui y lo hace en bautizos, quince años, matrimonios, fiestas de asociaciones de comerciantes y las de sus comunas. La comuna Cóngoma fue el escenario de sus primeras presentaciones, que ahora se extienden a Quito, Guayaquil y Esmeraldas.

José María Aguavil es el director del conjunto, al igual que sus dos hijos, José Gabriel y Luis Ángel. De los 10 integrantes siete son de la comunidad tsáchila y tres son mestizos. Luis Moreta es mestizo y pianista de la orquesta. Para él lo importante es que prevalezcan el conocimiento y el aporte de cada uno en la agrupación.

Los instrumentos que interpretan son: piano, guitarra, tumba, timbales y batería eléctrica. Este último lo maneja José Gabriel Aguavil, quien desde pequeño se interesó por el sonido del instrumento y el deseo de formar parte de un grupo musical.

José María Aguavil, por su parte, señala que la aspiración del conjunto es dar a conocer los orígenes de Santo Domingo. Cantar en tsáfiqui es una opción que les ha dado resultado. El conjunto musical tiene un promedio de tres presentaciones al mes. Además, el grupo quiere promover, por medio de la música, que los jóvenes y niños tsáchilas usen su idioma antes que el español.

Francisco Aguavil es el autor de 11 canciones cuya letra se apega a las costumbres y elementos de la naturaleza en su nacionalidad, como la titulada Alo Chipelé, que se refiere a un árbol sagrado para los tsáchilas donde se cree que están los espíritus de los antepasados.

En la nacionalidad Tsáchila hay otros dos grupos que promueven la música autóctona pero dentro de las comunas. Uno de ellos es el grupo cultural Tolón Pelé, cuyos cuatro integrantes pasaron a la siguiente fase del ‘reality show’ ‘Ecuador tiene talento’, de Ecuavisa.

Entre tanto, Bonkoro Tenka ahora trabaja en la preproducción de un video musical con miras a promocionarse en las redes sociales.

En Contexto

La nacionalidad Tsáchila tiene 2 500 habitantes que viven en siete comunas. La música es una de los protagonistas de rituales como las limpias y otras prácticas chamánicas. Turistas de todas partes del mundo acuden a su territorio para ser parte de esas ceremonias.

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