El edificio patrimonial de El Telégrafo, en Guayaquil se encuentra cercado por cintas de peligro. Foto: Mario Faustos/El Comercio
El Ministerio de Cultura y Patrimonio registra 1 051 repositorios de memoria entre museos, bibliotecas y archivos históricos en Esmeraldas, Manabí, Santa Elena, Los Ríos y Guayas, provincias que sufrieron considerables efectos del terremoto de 7,8 grados del pasado sábado. La Cartera de Estado aún evalúa la afectación global tras el sismo.
En la provincia de Manabí, los museos, archivos históricos y bibliotecas de Bahía de Caráquez, Manta y Portoviejo han sido “seriamente afectados”; sin embargo, cuentan con protección técnica y resguardo de la Policía patrimonial, informó el Ministerio. En el caso de la Basílica Menor de Montecristi, una de sus torres ha sido afectada.
Con 408 bienes muebles e inmuebles, Manabí es la provincia con mayor patrimonio en riesgo. En un informe elaborado por la entidad, a propósito del Fenómeno de El Niño, Manabí registró cuatro archivos históricos en riesgo en Chone y uno más en Pedernales y, en las mismas poblaciones, una biblioteca y un museo en zonas sensibles a eventos naturales como inundaciones o deslizamientos.
Portoviejo parece una zona de bombardeo. Frente a la Casa de la Cultura se desplomó un edificio de cinco pisos. El edificio de la Casa de la Cultura Núcleo de Manabí, en donde contamos con una muestra arqueológica y una biblioteca, está cuarteado”, informó Julio Villacreses, vocal de la Casa de la Cultura. Allí temen que con las réplicas pueda venirse abajo la estructura metálica del auditorio de la entidad.
Tania García Alvarado, coordinadora técnica del Instituto Nacional de Patrimonio, informó que en Esmeraldas y Guayas también existen bienes que han sido afectados, aunque en menor medida. Entre los inmuebles que registraron daños en Guayaquil están el Cementerio Patrimonial, los edificios de El Telégrafo y la Gobernación del Guayas, aunque con afectaciones “menores”.
No obstante, el edifico de El Telégrafo, inaugurado en 1923 y ubicado en el centro de la ciudad, permanecía ayer cercado con cintas amarillas de peligro por el desprendimiento de mampostería. El edificio de la Gobernación del Guayas, que también es patrimonial y fue construido en 1924, mantiene acordonada parte de la entrada oeste a la Universidad de las Artes (Uartes).
En el Puerto Principal, el Museo Nahim Isaías, el Museo Presley Norton y el Museo Antropológico y de Arte Contemporáneo (MAAC) también sufrieron daños. EL COMERCIO conoció, de forma extraoficial, que 20 piezas arqueológicas terminaron “destrozadas” en el MAAC, tras el sismo. Y las paredes del Archivo Histórico del Guayas sufrieron agrietamientos.
Las autoridades reconocieron pérdidas de piezas arqueológicas en exhibición en Manabí. Pero en Guayaquil, hasta la noche del lunes, Luis Mueckay, director de la Regional 5 del Instituto de Patrimonio Cultural (INPC) aún no recibía reportes de daños en el MAAC.
“He recibido la noticia que hay unas pocas piezas afectadas en la Casa de la Cultura Núcleo del Guayas”, indicó Mueckay, quien tras las evaluaciones preliminares descartó daños estructurales que pongan en riesgo las edificaciones en la Regional 5, que incluye a Guayas, Bolívar, Santa Elena y Los Ríos. “Hasta ahora no tenemos que lamentar cosas serias, pero aún estamos adelantando un recorrido más pormenorizado por los bienes”.
El arqueólogo Jorge Marcos Pino, director de la Escuela de Arqueología de la Espol, cuenta entre los yacimientos arqueológicos que pudieron sufrir mayores afectaciones a los que están en las cordilleras de la Costa. Entre ellos están los de Cerro de Hojas-Jaboncillo, en Manabí, ubicados entre Montecristi y Portoviejo, los del norte de esta provincia y de Esmeraldas.
En el 2007 se hizo un inventario y evaluación del estado de los yacimientos. Sería necesario que el INPC contrate un nuevo inventario de los sitios para evaluar que daños han sufrido”, señaló Marcos, quien descubrió el sitio Real Alto.