Las ocho parteras llegaron a Quito con la ayuda de voluntarios extranjeros que también viajaron con ellas hasta la capital. Foto: Isabel Alarcón/EL COMERCIO
Durante la realización del Hábitat III, el parque El Ejido se ha convertido en un espacio para diferentes expresiones. Este miércoles 19 de octubre del 2016, en uno de los costados del parque, llamaba la atención ver como dos mujeres que realizaban limpias a quienes se acercaban a su puesto, mientras otras personas mostraban productos artesanales a los transeúntes.
Roberto Carlos Cerda, voluntario quichua de la organización de parteras de Napo, cuenta que estas personas son un grupo de mujeres parteras quichuas, miembros de varias comunidades, que vinieron a la capital para participar en la conferencia de las Naciones Unidas.
Al llegar, menciona, se dieron cuenta que “es un lugar donde no cabíamos”, por lo que decidieron salir a compartir sus tradiciones y cultura en el espacio público. Esta mañana, se ubicaron en El Ejido donde realizaron un ritual para ayudar a las personas a liberarse de dolores musculares, reumatismos y malestares del cuerpo.
En el parque El Ejido, además, las funciones de humoristas y artistas callejeros no se han detenido por el Hábitat III. Foto: Isabel Alarcón/EL COMERCIO
Según Cerda, las curaciones consisten en cambiar la energía negativa y ubicar la energía positiva para que las personas puedan llevar una vida armónica en su medio y su familia. Cerda afirma que no volverán a entrar a las conferencias porque “eso no es para nosotros” y las parteras mostrarán sus dotes en este espacio, en el que en un inicio no les permitieron estar, cuenta.
Las ocho parteras llegaron a Quito con la ayuda de voluntarios extranjeros que también viajaron con ellas hasta la capital. La idea es continuar difundiendo sus saberes para que las personas se interesen por la riqueza cultural que hay en el país, indicó Cerda.
En el parque El Ejido, además, las funciones de humoristas y artistas callejeros no se han detenido por el Hábitat III. Aunque la conferencia de las Naciones Unidas se lleva a cabo a pocos metros de este parque, las personas se continúan acudiendo a un espacio donde disfrutan de las ocurrencias y escenas que recrean estos personajes de forma gratuita.
La mañana de este miércoles, los chistes se centraron en temas relacionados con la sexualidad, la tecnología y la inseguridad. A modo de broma, los artistas advertían a los extranjeros que guardaran su celular y tuvieran cuidado en los espacios públicos.
Con su credencial de Hábitat en el cuello, algunos foráneos se acercaron curiosamente a observar estas presentaciones, aunque la mayoría del público era local.
Para Patricio Aguirre, es ya una costumbre llegar hasta este lugar y escuchar por un momento las ocurrencias de los comediantes. Este visitante del parque dijo estar contento porque no se suspendieron estas manifestaciones culturales por las conferencias de la ONU.