Al entrar en contacto con el agua, las islas forman una biopelícula que capta los nutrientes en exceso. Foto: Twitter / @Ambiente_Ec
El estero Salado ha pasado por distintos tratamientos para mejorar su salud. En los últimos años se han instalado plantas de oxigenación para descontaminar sus aguas, se removieron casas de sus orillas para cambiarlas por parques lineales y se intensificó su limpieza, con embarcaciones que navegan en busca de desperdicios.
La receta más reciente son las islas flotantes, similares a cubetas plásticas en las que se siembran plantas nativas que funcionarán como biofiltros. 40 de estas estructuras, más dos lechos flotantes, navegan en un tramo del estero Palanqueado, junto al sector Cisne II, en el suroeste de Guayaquil. El proyecto piloto está a cargo de la subsecretaría de Gestión Marino Costera del Ministerio del Ambiente.
El pasado miércoles 9 de agosto de 2017, el ministro del Ambiente, Tarsicio Granizo, y otras autoridades llegaron al barrio popular del Suburbio donde se instaló este sistema de depuración desde junio de 2016. Se espera que los primeros resultados se obtengan dentro de seis meses.
La iniciativa cuenta con la cooperación de la Agencia de Cooperación y Coordinación Turca (TIKA). La inversión es de USD 399 000; de ese total, USD 200 000 fueron aporte del organismo extranjero.
Al entrar en contacto con el agua, las islas forman una biopelícula que capta los nutrientes en exceso. Su función será reducir los niveles de coliformes fecales y totales, nitrógeno, fósforo e incrementar el oxígeno disuelto en el agua. Estos han sido los principales contaminantes del Salado durante años.
Los moradores del Cisne II recibieron charlas para evitar la manipulación de las islas y para que colaboren en el mantenimiento del agua y sus alrededores libres de basura. En mayo pasado, 1 200 personas recibieron capacitaciones.
En el mundo se han instalado más de 6 000 islas, según informó el Ministerio del Ambiente. Esta es la primera vez que se usan en Ecuador. Los sistemas colocados en el Salado tienen además un equipo de aireación para aportar a la descontaminación del estuario.