En Cuenca se realizó una vigilia para exigir la aprobación de una ordenanza que protege a los animales. Foto: Lineida Castillo/EL COMERCIO
La noche de este 23 de febrero del 2016 se cumplió la Vigilia Blanca para exigir al alcalde de Cuenca, Marcelo Cabrera, que se incluya en el orden del día el debate de la ordenanza a favor de los animales domésticos.
El borrador del proyecto fue presentado en el 2015 por la concejala, Gabriela Brito y aprobado por el Concejo Cantonal en primer debate. Pero antes se cumplieron ocho meses de socialización ciudadana sobre el contenido y alcance de la misma.
El documento tiene un capítulo destinado a las responsabilidades ciudadanas para con los perros, gatos, gallos… Y otro de las obligaciones que tienen los custodios de las mascotas, los albergues o centros de rescate, las clínicas veterinarias y los profesionales de la medicina veterinaria.
El documento plantea sanciones económicas de hasta un salario básico unificado, dependiendo de la gravedad de la falta, para quienes atenten contra los derechos y la vida de cualquier mascota. Pero también habrá sanciones para los centros de atención que operen sin personal calificado.
La concentración de esta noche fue en la glorieta del parque Calderón, en el Centro Histórico. Durante el plantón, algunos participantes vestían ropa blanca como símbolo de paz y respeto a los animales. Otros llevaron a sus perros para despertar la sensibilidad y conciencia ciudadana. Hubo jóvenes portando caretas de animales y otros tocando tambores para llamar la atención.
Estuvo previsto también, la participaron algunos jugadores del Deportivo Cuenca, de clubes de autos clásicos, de motos y bicicletas que se muestran a favor de la iniciativa propuesta en la ordenanza. También colectivos ciudadanos creados para impulsar el respeto de las mascotas.
Según la concejala Brito, en noviembre realizó los ajustes de las observaciones realizadas por el Concejo Cantonal y presentó el nuevo documento en la Alcaldía. Sin embargo, no ha sido tomado en cuenta para el segundo y definitivo debate “y nos preocupa que se dilate el tema”.
Con la aprobación del proyecto de ley quedará prohibido suministrar sustancias que sean perjudiciales para la salud del animal, sedarlos sin la responsabilidad de un especialista, abandonarlos en algún lugar público o privado, provocar lesiones, implantar en su cuerpo dispositivos sin fines terapéuticos…
Para la concejala Brito, ya es hora de que la capital azuaya, en el sur del Ecuador, cuente con un sistema de manejo social de los animales. De acuerdo con estudios realizados por el Municipio, en el cantón hay una sobrepoblación de perros y gatos.
Se han contabilizado sobre los 120 000 de estos animales y muchos viven en condiciones de abandono. Según la norma internacional una ciudad debe tener entre el 10 y 15% de animales, con relación a su número de habitantes, y en el caso de Cuenca hay un perro por cada cuatro habitantes.