Los botines con cordones contribuyen al ‘look’. Foto: Julio Estrella/ EL COMERCIO
La moda western nos lleva a recordar aquellas películas del ‘Viejo Oeste’, donde el jean y los ambientes rústicos y secos se fusionaban en una sola imagen casual y descomplicada. Este estilo se puede adaptar en el siglo XXI, sin parecer una imitación de Clint Eastwood o estar fuera de onda.
La línea western ha ido evolucionando e introduciéndose poco a poco al mercado. Anteriormente se veía principalmente en accesorios, bisutería y bolsos, pero ahora ha tomado tanta fuerza que la vemos hasta en la decoración. Así lo afirma Sully González, diseñadora de la marca guayaquileña de prendas de mezclilla No More Jeans.
Carolina Lalama, diseñadora de calzado, agrega que este estilo ha sido adaptado entre los jóvenes que le dan un toque hippie, proponiendo el ‘streetstyle’ (estilo que se encuentra en las calles de las metrópolis) que es ahora tan popular en los blogs de moda.
Los festivales de música como Coachella se han convertido en la pasarela de la juventud. Este evento se realiza cada año en abril, en medio del desierto de Indio, California. En este contexto de artes y de paisaje árido, el estilo western resulta adecuado.
Coachella ha cobrado gran relevancia y se ha convertido en un termómetro de tendencias, tanto así que la cadena sueca de moda HM creó una colección especial y oficial en colaboración con el evento.
Marc Jacobs, Alice + Olivia, Fausto Puglisi, BCBG Maz Azria, entre otros, han retomado elementos de esta tendencia en sus pasarelas.
Pero el estilo western también es atemporal y el favorito de diseñadores como Roberto Cavalli y Ralph Laurent.
En Ecuador, adaptar este estilo no es difícil, pues basta con salir a las calles de las principales ciudades para saber que la ropa de mezclilla y las botas de cuero están entre los artículos más populares. Eso sí, hay que buscar las combinaciones correctas.
González recomienda usar piezas clave como jeans desgastados, vestidos en tela índigo, blusas del mismo material que tengan un bordado o encaje o blusas ‘off the shoulder’. Se puede agregar una chaqueta denim y una cartera de cuerdas largas con flecos.
En jeans, las siluetas que se están manejando son: ‘bootcut’ (basta ancha), ‘flare’ (acampanada)y el ‘boyfriend jean’ (un corte relajado, todoterreno). Las blusas tipo camisero en índigo y los enterizos overoles son muy aceptados en esta tendencia, dice González.
El otro protagonista de esta moda es el cuero. Los tonos miel y terracota de los zapatos y accesorios hacen una gran pareja con el azul profundo del jean. Los cordones, los lazos y los flecos son detalles que le dan un toque de diferencia al calzado y que se enmarcan en lo western, de acuerdo con Lalama. El cuerpo además le presta un sentido ‘agresivo’ al conjunto.
Este estilo puede ser usado básicamente todo el año en Ecuador, pues es muy versátil para el clima. Además, la paleta de color permite salirse de los colores básicos (negro y blanco) y explorar los tonos tierra. Estos, según Lalama, pueden ser combinados con negro, café y gris. Facilidad que no se tiene al usar como principales a otros colores.
Moda
La moda del Lejano Oeste es atemporal y ahora se enmarca en ‘outfits’ casuales, pero con estilo