Hoy, 5 de febrero del 2014, se dictó prisión preventiva en contra un médico en la ciudad de Ibarra, provincia de Imbabura, en el norte de Ecuador. Se trata del doctor Miguel T., anestesiólogo, que fue detenido por la Policía un día antes, a las 22:00, luego de la operación de un niño que falleció en el quirófano.
La madre del infante habría presentado la denuncia. Según informes de los gendarmes, el menor de edad habría sido ingresado en una clínica privada de la capital de Imbabura, para que le realicen la circuncisión del prepucio. Miguel T. estaba encargado de la anestesia, mientras un colega suyo, que tiene la especialidad de Urología, habría realizado la operación la tarde del 4 de febrero último.
A pesar que el urólogo habría asegurado a los familiares del niño que todo salió bien, el pequeño no despertó más. Según el parte policial, “no habría resistido a la anestesia, siendo la posible causa de la muerte shock anafiláctico”.
La tarde de hoy se realizó la audiencia de formulación de cargos. Las autoridades judiciales de Imbabura dictaron prisión preventiva contra el profesional de la salud.
Este incidente ocurre en el marco de la polémica que se generó por la aprobación del nuevo Código Penal ecuatoriano, que tipifica como delito el homicidio culposo por mala práctica profesional. Ante lo cual varios médicos del país han protagonizado marchas y han anunciado renuncias, porque consideran que se está atentando contra su profesión.