En ‘Todo tiene su hora’, la decimotercera placa de Juan Luis Guerra, se mantiene el preciosismo en los arreglos y la fusión de ritmos que han caracterizado a los 4-40. A la par, el autor aborda el romance, el amor paterno y la temática social desde su tradicional perspectiva. En su visita a Quito hace un par de semanas, Guerra brindó más detalles sobre su obra.
Juan Luis, hay mucha guitarra en su disco…
Muchísima. Si tú te das cuenta, en los merengues yo toco mi guitarra pero tengo mis guitarristas (en vivo). Yo grabo todas mis guitarras y en vivo traigo un guitarrista para que haga lo que yo hice. El piano y la guitarra deben llevar un juego entre ellos, especialmente en lo que es bachata y merengue. Es algo que ya podemos manejar después de muchos años de experiencia.
En este disco hay un tema para su hija Paulina (Muchachita linda) y un par para su esposa (Dime Nora mía y Para que sepas). ¿Les presentó el tema final o una serenata solo con guitarra?
A no ser que sea una balada no me gusta presentar (una canción) cuando no está (completa) o hasta que no tengo el demo porque la gente no se da cuenta. Puedo tenerla en mi mente y en mi corazón orquestada pero la gente no. Preferí hacer un demo completo y enseñársela. A las dos se las enseñé y estaban felices con las canciones.
Años atrás declaró que su hija será compositora. ¿Será que algún momento interpretará algo de ella?
¡Ojalá! Fuera un gran regalo. Cada vez que le pregunto a mi hija qué quiere hacer, me dice que va a estudiar música. Yo no quiero forzarla pero si decide ser músico va a ser una bendición para su papá. Voy a estar feliz de poder compartir con mi hija. Estoy seguro que me va a pedir consejos. Si va a estudiar orquestación (me preguntará) ‘papi ¿cómo va esta trompeta o este trombón?’. Para mí sería un sueño… pero quiero que ella tome su decisión.
Las cuerdas y la influencia clásica tienen un gran peso en el álbum. ¿Ha pensado escribir una sinfonía?
Tengo en mente (eso) hace mucho tiempo y estoy casi al punto de trabajar una obra clásica que tengo. Ya estoy echado con los movimientos, solamente necesito dedicarme específicamente a esa obra. Soy un amante de la música clásica. Aprendo tanto de todos los grandes compositores desde Bach hasta Mahler y es algo que sueño y quiero hacer. Cuando te pones a oír los merengues en ‘Todo tiene su hora’ ahí utilizo cuerdas, cuerno francés, campanas tubulares… como diciendo a gritos ‘realmente quiero trabajar algo clásico’ (risas).
¿Cómo fue contar con la colaboración de Johnny Ventura, en el tema De Moca a París?
(Él) ha sido un soporte en mi carrera desde mis inicios. Cuando uno comienza recibe críticas y el que empieza no las sabe tomar bien. Solo cuando tienes cierta experiencia sabes cómo tolerarlas. En ese momento, cuando fue más difícil para mí, él fue el apoyo principal simple y llanamente con una frase que me dijo. No era una persona normal, era la primera figura del merengue en la República Dominicana. La presencia y el carisma de Johnny Ventura son únicos. Ahora tuvimos la oportunidad de grabar un merengue, que es un perico ripiao (trío dominicano), y para mí fue un orgullo y un privilegio tenerlo ahí.
¿Cuál fue esa frase?
A la mata que da frutos se le tira piedras (risas). Nunca se me olvidó.
¿Usted también ha sido un soporte para nuevos músicos?
Claro que sí. Siempre debemos tener palabras de aliento por el otro. Empezar por lo bueno.
¿A Juanes, por ejemplo?
Claro. Mi querido Juanes, claro que sí. Mi querido Juanes ‘palante’ siempre. Sobre todo con cosas que yo he pasado que él está pasando ahora o que van a pasar. Cada cual tiene sus obstáculos; están ahí para ser saltados.
En el disco hay bachata, merengue, salsa y son. Es muy bailable, ¿cuál es su relación con el baile?
No, no, no. Cuando tengo que bailar bailo pero ni siquiera… mi esposa, a veces -ya no gracias al Señor- a veces me dice ‘vamos a bailar’. Y yo (le digo) ‘¡pero ‘mija’! ¡Lo que yo hago es poner a bailar al otro!’. Pero no soy dado. En la República Dominicana y en nuestros países es muy dado ir a un salón y bailar. En realidad, creo que me enfoqué más en poner a bailar a los otros. Pero eso no quiere decir que no baile; si en un momento determinado tengo que bailar, lo hago.
Mire la primera parte de la entrevista con Juan Luis Guerra
‘Todo tiene su hora’
La placa tiene 10 temas entre los que se incluye el sencillo Tus besos, una fusión entre rock y bachata. Todos los ‘tracks’ fueron escritos, arreglados y producidos por Guerra, bajo el sello Capitol Latin/Universal Music. La edición con EL COMERCIO cuesta USD 5,99 más el ejemplar.