Francisco Borja Cevallos, Ministro de Cultura y Patrimonio. Foto: Jenny Navarro/ EL COMERCIO
Entrevista
Francisco Borja Cevallos/ Ministro de Cultura y Patrimonio
¿Ha identificado los cambios que tiene que hacer?
Hay muchos, pero no quisiera precisar porque estamos en el proceso de definirlos.
¿Siguen en el diagnóstico?
Claro, y no quisiera, como un actor determinante, dar mis percepciones ni mis prioridades. Pero el cambio tiene que ver con la actitud, los comportamientos, con el buen vivir.
¿El Ministerio se adhiere a la propuesta del buen vivir?
Por supuesto. Esa es una línea importantísima.
¿En qué ámbitos convergen el buen vivir y la cultura?
En el uso del tiempo libre. Por ejemplo. André Malraux, cuando era ministro de cultura y le preguntaron cuál es su plan, dijo: “Que el Ministerio de Cultura sea el administrador del tiempo libre de la gente”. Es una idea muy sugerente.
Algunos podrían pensar que incluso es invasiva.
El Ministerio de Cultura lo que menos quiere es controlar; lo que vamos a hacer es garantizar oferta cultural para que la gente disfrute de su tiempo libre.
¿Hay fecha tope para hacer públicas sus propuestas?
Quiero hacerlas públicas en la nueva Ley de Cultura.Espero tener un borrador muy avanzado en el primer semestre.
¿Se ha reunido con la comisión que lleva la Ley?
He hablado con Ximena Ponce, presidenta de la comisión, y con Gabriela Rivadeneira (presidenta de la Asamblea). Luego, cuando tengamos el esqueleto del Sistema Nacional de Cultura, compartiremos con los actores de la cultura.
¿Las visiones de cultura del actual ministerio y de la comisión coinciden?
No hemos hablado de eso. Eso pasará cuando hayamos estructurado el esqueleto.
¿Puede adelantar una de las políticas que ha ideado?
Algo que es muy importante es la relación con la Casa de la Cultura. Creemos que debe seguir existiendo, ser independiente en lo financiero y en su gestión, y ser un actor fundamental de la cultura. El Ministerio, en cambio, tiene que fijar las grandes políticas.
Entonces ¿no se interferirá con la autonomía de la Casa de la Cultura?
No. Las políticas generales son casi obvias. Nadie puede estar en contra de fortalecer la identidad nacional o promover la interculturalidad.
¿Buscará que la Ley promueva el mecenazgo?
Yo soy partidario de eso, pero eso no depende solo de mí, sino del Ministerio de Finanzas, de la Presidencia, del SRI.
¿Ve apertura en ellos?
No hemos tocado el tema.
¿Se han planteado buscar soluciones legales definitivas a la tramitología que dificulta los emprendimientos culturales?
Le vamos a meter el diente a eso también.
¿Cuál sería la solución a ese problema puntual?
Estamos trabajando. Es que hay cosas tan absurdas como que a los libros no los podemos ni regalar ni vender. Y vamos a buscar alguna reforma.
¿Qué ha pensado para infraestructura subutilizada como la del Maac, por ejemplo?
A ver, en museos tenemos varias ideas.
¿Cuáles?
No, no…
¿No me puede decir?
No, tenga paciencia. Lo peor que puede hacer un funcionario es anunciar sus ideas. Porque entre la idea y la concreción median un montón de factores. Pero una de nuestras prioridades van a ser los museos, aunque estamos muy cortitos de presupuesto este año.
Tienen 34 millones.
No, quedamos en 22 por los recortes y arrastres. Pero voy a tener una reunión con el Ministerio de Finanzas para tratar de recuperar algo.
¿Qué se tiene que dejar de hacer por este recorte?
Tenemos un plan operativo anual, del que no quiero hablar ahorita porque esto lo vimos recién ayer (lunes).
¿Cuáles son los lineamientos para las ferias del libro 2015 en Quito y Guayaquil?
Queremos replantear las ferias para que dejen de ser un esfuerzo exclusivamente público y sean un esfuerzo combinado con las cámaras.
En Quito, Chile será el país invitado este año, ¿hay algo más en concreto o está todo por definirse?
Estamos trabajando.
¿Se ha pensado en tener una sola buena feria, como pasa en México o Alemania?
Sí, y hay que pensar en otra feria cultural, de artes, para hacer en Guayaquil. No tiene sentido tener dos ferias del libro. Pero como Ecuador ha sido siempre bipolar.
Dejar la feria del libro para Quito y la de artes para Guayaquil ¿tiene que ver con el estudio que mencionó la exsubsecretaria Daniela Fuentes y que arrojó la conclusión de que en Guayaquil a la gente no le interesa leer?
No, yo creo que sí les interesan los libros. Y no conozco el estudio ni me ha sido comunicado. Pero si tenemos tan pocos recursos para promover la cultura, organizar dos ferias del libro no tiene sentido. Es mucho mejor hacer una feria del libro en cualquiera de las dos ciudades y otro evento igualmente importante de otras artes que merecen también atención. Pero nada está decidido.
Cuando usted asumió el cargo, el Ministerio tenía 600 empleados, ¿es necesaria esta cantidad de personal para delinear las políticas culturales?
Estamos evaluando. Tenemos que tener las personas que son indispensables para llevar adelante los proyectos de cada subsecretaría. Y creo que en algunos lados no se necesita tanta gente y en otros hace falta; quizá tengamos que hacer una movilización de personal de un lado a otro.
Hoja de vida
Francisco Borja Cevallos nació en Quito en 1949. Su formación académica fue como diplomático; sin embargo, desde los años 80 estuvo involucrado principalmente en periodismo.
Es Ministro de Cultura y Patrimonio desde el 16 de septiembre del 2014. Antes estuvo siete años como embajador de Ecuador en Chile.