El Fondo Nacional de Salud distribuirá el presupuesto a las casas de salud y se encargará de verificar que se haga una asignación y una inversión más óptima. Foto: EFE.
Los hospitales del Ministerio de Salud, del IESS, de las Fuerzas Armadas y de la Policía mantendrán sus presupuestos para seguir funcionando. Sin embargo tendrán un ente sobre ellos que se encargará de verificar que se haga una asignación y una inversión más óptima.
Lo dijo el presidente del Ecuador, Rafael Correa, este 16 de mayo del 2015, en su enlace sabatino 424. Ahí recordó que el Fondo Nacional de Salud (en proceso de creación) distribuirá el presupuesto a las casas de salud de acuerdo a un análisis de necesidades, principalmente del número de pacientes que demandan servicio.
Además pagará por las prestaciones de salud a las diferentes instituciones del país, luego de que den la atención a los pacientes. La propuesta es que una persona, sin importar que sea afiliado al IESS o al seguro de Fuerzas Armadas pueda ir a cualquier hospital y recibir atención médica.
Esto ya lo hacía el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social en menor escala. Cuando no tenía capacidad, el paciente era derivado a una casa de salud privada. Sin embargo, el mismo Gobierno detectó que se cometieron irregularidades. Por ejemplo, los médicos enviaban pacientes a casas de salud cuando el IESS sí podía atenderlos y también a ‘dedo’.
Las clínicas facturaban cada mes por el costo de la atención a pacientes. Para resolver el problema incluso se propuso un nuevo modelo de derivaciones. Este incluye criterios como lugar de residencia, número de aportaciones, ingresos económicos de los afiliados, entre otros.
Ahora el Fondo se encargará de cruzar cuentas con las diferentes instituciones y pagar por los servicios. Correa aclaró que los servicios del seguro de Fuerzas Armadas y de la Policía, así como el Seguro Social se mantendrán.