Su empleo en diferentes puntos del cuerpo estimula el sistema nervioso y logra, de esa manera, eliminar la hormona del estrés. Foto: Infobae
El ‘foam rolling’ o auto-liberación miofascial se instaló en los últimos meses como un complemento en las rutinas fitness. Se trata de un rodillo de espuma circular que libera tensiones y participa en la recuperación muscular.
Su uso se aplica, sobre todo, en dos momentos claves: antes y después de la práctica. Así, se activa la musculatura para emprender el ejercicio y luego, para reducir el dolor. Incorporarlo antes de la rutina ayuda a flexibilizar músculos y articulaciones, y además, previene posibles lesiones que puedan desencadenarse durante la clase.
Su uso en el post-entrenamiento, en cambio, elimina el ácido láctico liberado durante la rutina y agiliza la recuperación corporal.
Su incorporación continua crea un “masaje de gran poder detox que libera las toxinas del cuerpo y provoca que la rehidratación de los tejidos sea mucho más efectiva”, según Federico Rives, ‘coach’.
Su empleo en diferentes puntos del cuerpo estimula el sistema nervioso y logra, de esa manera, eliminar la hormona del estrés y generar “una sensación de relajación para un rendimiento óptimo, a nivel físico y mental”, agregó Rives.
Al ‘foam roller’ también se lo utiliza para tonificar. “Se lo puede usar para ejercitar la resistencia, el equilibrio, la fuerza y hasta la capacidad cardiovascular del cuerpo”, detalló el especialista.
También sirve para moldear la figura, “puede aprovecharse para imitar movimientos que se hacen en pilates”, dijo Lauren Roxburgh.