Un festival para proteger a los murciélagos de Guayaquil

En en el bosque protector Cerro Blanco de Guayaquil se realizó el BaT Fest, para hablar sobre la importancia de los murciélagos. Foto: Cortesía Fundación Probosque

En en el bosque protector Cerro Blanco de Guayaquil se realizó el BaT Fest, para hablar sobre la importancia de los murciélagos. Foto: Cortesía Fundación Probosque

Los murciélagos cumplen una tarea vital en la polinización de varias especies de plantas silvestres y productivas. Foto: Cortesía Fundación Probosque

Limpiar la imagen de los murciélagos fue el propósito del primer Bat Fest, un festival organizado en el bosque protector Cerro Blanco de Guayaquil. Con charlas educativas, títeres, juegos y un campamento de conteo se hizo conciencia sobre la importancia de estos mamíferos, un tanto incomprendidos.

Los quirópteros juegan un rol fundamental en los ecosistemas, debido a los múltiples servicios ambientales que prestan. Lejos de las películas que les han marcado un sello de terror, los murciélagos cumplen una tarea vital en la polinización de varias especies de plantas -silvestres y productivas-, y aportan a la dispersión de semillas relevantes para la agricultura.

Además, ayudan a la a regeneración de los ecosistemas. Eso, sin contar que su alimentación resulta vital para el control de plagas. Ciertas especies de murciélagos incluyen en su dieta enormes cantidades de insectos, algunos de ellos portadores de enfermedades como el dengue y la fiebre amarilla.

“Un solo murciélago es capaz de alimentarse de más de 1 000 mosquitos en una sola hora; por lo tanto, cada millón de murciélagos puede destruir en promedio unas 10 toneladas de insectos por noche”, cita el Plan de Acción para la Conservación de los Murciélagos del Ecuador, un documento del Ministerio del Ambiente.

En en el bosque protector Cerro Blanco de Guayaquil se realizó el BaT Fest, para hablar sobre la importancia de los murciélagos. Foto: Cortesía Fundación Probosque

Incluso su excremento es utilizado como fertilizante en cultivos agrícolas. El guano contiene altas concentraciones de nitrógeno y fósforo que aportan al crecimiento de las plantas.

La mañana del sábado 18 de noviembre del 2017, Cerro Blanco recibió a niños a adultos para enseñarles los beneficios de estos animales de grandes orejas, que les sirven como radar. Lo hicieron con talleres de pintura al aire libre, música y dinámicas. Pero los guardaparques también les explicaron algunas de sus amenazas.

La pérdida de hábitat, la destrucción y perturbación de sus refugios, los conflictos murciélago-humano, las enfermedades emergentes y el uso indiscriminado de sustancias tóxicas son los principales riesgos que ha detectado la Red Latinoamericana y del Caribe para la Conservación de los Murciélagos.

En la región se han registrado más de 360 especies. De ese total, 58 se encuentran en peligro de extinción según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza.

En la región se han registrado más de 360 especies de murciélagos. De ese total, 58 se encuentran en peligro de extinción. Foto: Cortesía Fundación Probosque

En Ecuador, hasta el 2015 habían sido identificadas 171 especies. De ellas, 19 están amenazadas, nueve han sido catalogadas como casi amenazadas y 30 están en la clasificación de datos insuficientes, de acuerdo con el Libro Rojo de los mamíferos del país.

Con una extensión de 6 070 hectáreas, Cerro Blanco -que es administrado por la Fundación Probosque- fue nombrada área de conservación de murciélagos en el 2014, la primera del país. Aquí han sido registradas 32 especies de quirópteros, algunas nuevas para la ciencia, como la Eumops wilsoni (en 2009); y otras que no se veían hace más de 50 años, como la Micronycteris megalotis.

Está previsto un campamento de conteo de murciélagos. Es una jornada en medio de la naturaleza, un recorrido por los refugios que tiene la reserva junto a ductos de agua y entre los árboles.

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