Los accesorios decorativos fusionan policromía, diseño contemporáneo y nuevos materiales. Foto: El Comercio
Las tendencias actuales influyen en la decoración de Navidad, pero sin guirnaldas no se puede imaginar. Estos adornos clásicos y que no pasan de moda son tradicionales. Tampoco se concibe un arreglo sin velas de colores y aromas.
En la actualidad, es más fácil decorar los ambientes de una vivienda por la disponibilidad de adornos navideños que existen en los centros comerciales y locales exclusivos.
Este año la Navidad se ha aliado a un tema mundial: la ecología. Materiales naturales, como la madera en estado puro o lacada con pinturas sin plomo, lana, mimbre, parafinas sin componentes tóxicos… se adaptan a la perfección a formas clásicas de adornos navideños.
Otra novedad ha inundado el mercado de adviento 2014: la aparición de accesorios decorativos de materiales como el alabastro y, especialmente, el acrílico, un tipo de plástico muy versátil y maleable.
La gracia del acrílico, explica Carmen Rendón, dueña de Fiorella (av. De la Prensa y Río Curaray), es que puede permanecer largo tiempo en la intemperie sin sufrir daño alguno.
Fiorella tiene un vasto menú navideño en este material. Un minicastillo translúcido, con iluminación, cuesta USD 30; mientras que una iglesia de mediano formato, también transparente y con iluminación tenue, se oferta en USD 130.
Un reloj cucú, de madera lacada y acrílico, cuya cuerda está programada para que cada hora salga un petirrojo a dar la hora vale USD 240.
Los pesebres y nacimientos de cortes contemporáneos también son tendencia.
En Casa Sibilla (av. Pampite, edificio Officenter, Cumbayá) un peculiar nacimiento de porcelana pintada a mano por el italiano Marcello Jori lanza sus coloridos anzuelos a quien lo admira. Lo sui géneris del pesebre es que tiene la forma de árbol de Navidad y los personajes están representados por unos coloridos bombillos con los rostros de la Sagrada Familia, los reyes magos, los pastores. Su precios es de USD 440.
Fiorella también exhibe dos pesebres de corte posmoderno. El uno es de alabastro y se oferta en USD 130 y el otro es de cerámica y sale por USD 115.
Tanto Casa Sibilla como Fiorella tienen finas y artísticas vajillas alusivas a la fecha.
Las copas de vidrio cortado de color rojo de la marca italiana Livellara ponen un toque chic en cualquier cena navideña, afirma Sibilla Pontoni, de Casa Sibilla. Cada unidad tiene un valor de USD 18.
Pero toda decoración navideña se vería incompleta sin unas velas a tono. Vela y Canela (avs. Río Coca y 6 de Diciembre, Quito) es especialista en ese campo y ofrece una variedad sinfín de esos motivos.
Una guirnalda con una gran vela azul, con follaje de plástico, se expende en USD 95. Pero hay otras, de todo precio.