Los discos de oro, platino y diamante son los premios más importantes que se entregan a los cantantes por el número de copias vendidas de sus trabajos.Solistas, grupos y autores ecuatorianos han sido homenajeados por sus disqueras con este reconocimiento. Ayer, el cantante quiteño Juan Fernando Velasco recibió triple disco de platino y uno de oro tras vender 25 000 copias de su última producción ‘Con toda el alma’.
Para Velasco, este reconocimiento lo compromete con sus seguidores para “dar más dentro de su carrera”. La exitosa venta de los CD del cantante se produjo en tres horas.
Aunque la entrega de discos de oro y platino ha ido disminuyendo con el tiempo, como lo asegura Jorge Luis Bohórquez, productor musical, ecuatorianos como la intérprete de música nacional Hilda Murillo tienen discos de oro en sus más de cuatro décadas de carrera profesional.Sin embargo, Murillo dice que la entrega de reconocimientos al artista por sus ventas ya no tiene vigencia en el país. La causa es la crisis de la industria fonográfica nacional, que se inició en la década de los noventa, a causa de la piratería, principalmente.
En la actualidad, ya no se produce industrialmente. Las disqueras se encargaban de la promoción, las conexiones con las disqueras internacionales y las relaciones públicas. Eso ya no ocurre, dice y acota: “Ahora, los mismos artistas producimos nuestros discos compactos. Empresas como J. D. Feraud Guzmán ayudan con la comercialización. Pero, la mayores ventas se las hace en los espectáculos”.
Otro de los artistas que ha sido premiado con un disco de oro es Daniel Betancourth. El cantante pop obtuvo este premio con su disco ‘Seductora’ (2008), con el cual vendió 3 000 copias.
El disco de oro se lo entregó su disquera Borkis enterteiment en medio de su primer concierto. Él aún no ha olvidado la sensación que tuvo ese día. El guayaquileño asegura que su emoción fue tan grande que se olvidó la letra de las dos canciones que interpretó luego de obtener su galardón y que incluso no sabía como desenvolverse en el escenario.
Una sensación similar fue la que sintió Mariela Nazareno, ex integrante del grupo de pop Kiruba. La cantante tiene su premio colgado en una de las paredes de su dormitorio y se sabe de memoria lo que dice la placa.
El grupo, que estuvo integrado por cinco chicas, recibió doble disco de platino por lograr vender cerca de 25 000 copias en aproximadamente dos meses. Una de las cosas que más le emocionó a Nazareno fue la rapidez con la que el grupo obtuvo el premio. “Recién teníamos seis meses desde cuando se inició nuestra trayectoria y ya nos dieron un premio tan importante”.
Para Wilfrido Muñoz, manejador de artistas, este reconocimiento es uno de los más reales que puede obtener un cantante. Para él, la medición de ventas no solo se da por el gusto que tenga una persona por el artista, sino por lo que siente cuando escucha una canción.
Muñoz, quien era representante en Ecuador de la disquera estadounidense Universal, entregó un disco de oro y de platino a Fausto Miño, en el 2007.
A pesar de esto, Muñoz asegura que la entrega de estos premios ha ido modificando el número de ventas debido a la circulación de discos piratas.
El compositor Luis Padilla es otro ganador de un disco de oro. En 1979, su composición Yo esperaré, tu cambiarás, interpretada por el cantante guayaquileño Darwin, vendió 350 000 copias, cuando los parámetros existentes eran 100 000. El reconocimiento lo hizo Ifesa.
“En la actualidad, vender 5 000 ya es éxito. Porque ya no hay industria, como Famoso, Ifesa o Fediscos”, dice Padilla. Acota que ahora son los productores independientes o los mismos artistas, quienes venden sus CD.
En eso también coincide el cantante guayaquileño de pop Danilo Parra. “Al no haber industria nacional ya no se puede establecer reconocimientos por ventas. “Eso no existe”.
Jenny Estrada, directora del Museo de la Música Popular Julio Jaramillo, señala que el cantante es uno de los más reconocidos nacional e internacionalmente. Sin embargo, es casi imposible determinar cuántos discos de oro o platino recibió en su carrera, ya que no guardaba ese tipo de reconocimientos.
Grupos como los Intrépidos y Tranzas o compositores como Héctor Abarca también ha sido premiados con oro.