Cuando Gustavo Cerati sube al escenario, parece entrar en trance. Entre su micrófono, su guitarra y su habilidad no hay cabida para el error. Luce como alguien exigente consigo mismo, tan concentrado en su música que impresiona.
“Es de un nivel estético altísimo, tiene una presencia plástica. Su postura en el escenario es fuerte. Es como si vieras a un actor interpretando el papel del músico, es como mirar un cuadro”, dice el comunicador y músico Diego Cazar. Y con él coinciden muchos seguidores del músico en Soda Stereo y como solista.A Cerati le gustó la música desde chico. Lilian Clark, su madre, recordó a su hijo como “aquel niñito rubio que tomaba un palo de escoba y decía que iba a tocar la guitarra”, en una entrevista con Todo Noticias, de Argentina. Fue al hablar del estado de salud del músico, que está en estado de coma inducido. Esta semana fue operado para liberar presión en su cerebro, luego de que sufriera un accidente cerebrovascular isquémico.
Cerati cantó en coros de iglesias y tuvo bandas de ‘covers’. Pero no fue sino hasta que se juntó con Zeta Bosio, su amigo de la facultad de Publicidad, y con el baterista Charly Alberti, que logró cristalizar sus sueños de música propia, en Soda Stereo. En 1993, el grupo daba shows en discotecas, y en 1984 publicó ‘Soda Stereo’. De allí en más, el trío forjó una carrera con éxitos cada vez mayores.
Logró que sus fans, luego de escuchar sin pausa temas como Signos, Canción animal, Nada personal … se convirtieran en ‘sodamaníacos’. Más de un millón de fans llenaron 22 shows en nueve países de América, en la gira Me verás volver, 10 años después de la separación del grupo, en 1997.
Marisa (quien prefirió no identificarse) es una de las seguidoras quiteñas que vio a Soda en Guayaquil en octubre del 2007. Para ella, uno de los puntos que hacen de Cerati un gran músico es que junto a su banda logró excelencia musical. Le gustan las letras de Cerati para Soda, porque cree que tienen una identidad con la forma de manifestar amor o reflejar la realidad de los latinos.
Esta seguidora de Soda no tiene la misma pasión por la música de Cerati como solista que en el legendario trío. Aunque respeta su trabajo, cree que lo que vino después de Soda no llegó a los niveles del trío. Según ella, Soda es una banda de culto del rock latino. “Hoy siento que los grupos son pasajeros. Ya no hay bandas como Soda, con una calidad que las convierta en clásicas”.
Cerati forjó un estilo propio que se convirtió en un pilar del rock en español. En su web se detalla la influencia de grupos como King Crimson o The Beatles y, particularmente, de músicos como David Bowie de Pink Floyd, Jimmy Page de Led Zeppelin o Ritchie Blackmore, de Deep Purple.
Ha incursionado en diversos géneros, hasta la electrónica, siempre en un afán de experimentación. Músicos ecuatorianos como Danilo Arroyo han sentido su influencia. “Recuerdo con exactitud la primera vez que vi el video de Música ligera, una de las canciones que marcó mi decisión para dedicar mi vida a la música”.
El ex baterista de La Grupa vive en EE.UU. desde el 2007 y luego de Soda siguió a Cerati como solista, con el disco ‘Bocanada’. “Por muchos meses fue mi banda sonora en momentos de alegría, penas… Hablar de Cerati es hablar de una de mis influencias más grandes musicalmente (…) es hablar del ícono más importante del rock latinoamericano”.
Al final de su gira Fuerza natural, Cerati está hospitalizado.
Ayer se habló de una leve mejoría. Adolfredo Sáez, director del centro donde está internado en Caracas, reveló que “los resultados fueron normales, no hay daño neurológico”, pero la espera por la recuperación será larga. El neurólogo argentino Ramón Leiguarda, que viajó desde Buenos Aires, coincidió con Sáez. Recalcó que la vida de Cerati no corre peligro en este momento, salvo “una complicación muy inesperada”.
Colegas y fanáticos, por varios medios, le dicen “Fuerza Cerati”.
Su trayectoria
Gustavo Cerati nació el 11 de agosto de 1959 en Buenos Aires, Argentina.
Formó en 1983 el grupo Soda Stereo con Charly Alberti y Zeta Bosio. Antes tocó con músicos como Richard Coleman, Daniel Melero y Andrés Calamaro.
Desde 1997, en que se separó Soda, fue solista. Hace cuatro años sufrió de tromboflebitis.
Testimonio de Danilo Arroyo, ex baterista de La Grupa, ahora con Lemon Road, en EE.UU.
Todavía recuerdo con exactitud la primera vez que vi el video de Música ligera a principio de los noventa… Tuvo tanto impacto en mi que fue una de las canciones que marco mi decisión para dedicar mi vida a la música.
A finales del año 97, cuando regresé a Ecuador después de mis estudios de música en EE.UU., mi primer trabajo fue tocando covers con Juan Fernando Velasco en la Plaza de las Américas. Juan Fernando recién salía de los Tercer Mundo y empezaba su carrera como solista, no tuvimos que pensar mucho para decidir que la mayoría del repertorio serían canciones de Soda Stereo.
En el 2007, cuando me mude a Los Ángeles para continuar con mi carrera, Cerati y su disco ‘Bocanada’ me acompañaron por muchos meses. Fue mi ‘soundtrack’ diario en momentos de alegría, penas, logros, fracasos, amores y desamores… A finales de ese mismo año estuve en primera fila en el concierto de la gira Me verás volver, en California. La emoción fue tal que tuve que secar algunas lágrimas en mi cara.
Coincidencialmente, el DVD de su ultima gira en vivo ha estado noche y día estas dos últimas semanas en mi televisión…
Hablar de Cerati para mí es hablar de una de mis influencias más grandes musicalmente, sus canciones han marcado momentos trascendentales en mi vida. Hablar de Cerati es hablar del icono más importante que tiene el rock latinoamericano.
Estamos esperando su total recuperación.
¡Fuerza Cerati!