Marketing, publicidad o simplemente la búsqueda de una paz interior… ¿Qué es lo que motiva a ciertos famosos a revelar sus preferencias sexuales? En los últimos tres años las estrellas han ‘salido del clóset’. El 29 de marzo pasado, Ricky Martin hizo pública su homosexualidad en un comunicado en su página de Internet. Después de años en que los medios rumoraran sobre su preferencia sexual y tras las repetidas negaciones del cantante puertorriqueño, decidió contar al mundo que “a pesar de ser un proceso intenso fue muy liberador” decir que es gay. Aunque en el mismo comunicado anunció que tomó la decisión poco antes de publicar su libro de memorias. El mismo hecho sucedió con Cynthia Nixon, una de las actrices de la serie y cintas ‘Sex and the City’, quien antes de estrenarse el segundo filme hizo pública su relación con la activista Christine Marinoni. Nixon convive con Marinoni desde el 2004; sin embargo, antes del estreno optó por hablar públicamente sobre su relación amorosa y la aceptación del tema por parte de sus dos hijos. Para Roberto Bravo, coordinador de la Fundación Ecuatoriana Equidad, revelar sus preferencias es un riesgo para los artistas. Bravo dice creer que, por una parte, escuchar esa noticia puede resultar atractivo y ellos podrían comercializarse más, pero también podrían enfrentarse al rechazo público. Negación que en determinado momento sintió Christian Chávez, ex miembro de RBD. En una entrevista para Televisa, el cantante mexicano dijo sentirse atemorizado por el qué dirán y sobre todo por qué pasaría con su carrera musical al aceptar su homosexualidad.Asesorado por el mánager del grupo, Chávez se destapó en un comunicado oficial en marzo del 2007. Allí señaló que después que se publicaron fotografías suyas comprometedoras decidió crecer y aceptarlo. Chávez no habla sobre el tema en entrevistas, en su rueda de prensa en Ecuador fueron los medios quienes hacían referencia a su homosexualidad. La promotora de artistas Gissela Heredia considera que este tema no beneficia ni perjudica en nada a los artistas. Según ella, es simplemente el hecho de compartir con el público un poco de sus vidas privadas, sin presión y para sentirse bien con ellos mismos.Pero el activista Efraín Soria dice cree que las revelaciones obedecen a dos situaciones. Una, regularmente, es la presión de otras personas. “Los puede obligar también el chantaje de la gente que conoce su vida. No ven otro medio para estar tranquilos que hablarlo públicamente”.Aunque tal y como lo señalaba Martin en su texto, Soria está de acuerdo con que muchos de ellos han encontrado un buen ambiente y un círculo de apoyo que ha favorecido para que salgan del clóset. “Les quita un peso de encima, alguien les da fortaleza”.Soria no se arriesga a decir si se trata de una campaña de marketing. Algo que sí hace Wilfrido Muñoz, ex gerente de Universal y ahora promotor de artistas. Para él es evidente que cuando un artista necesita publicidad debe recurrir a las estrategias y armas que tenga. “Hay excepciones, pero hay mucho de mercadeo en la realidad”.