Las enfermeras compartían los videos que mostraban cómo trataban a los bebés en el hospital en sus redes sociales. Foto: captura.
Un grupo de enfermeras sauditas practicaba un ritual con cada bebé que atendían en un hospital de Taif. Jugaban a aplastar la cabeza, los ojos, el cuello y las diferentes facciones del recién nacido para crear supuestas “caras graciosas”. Grababan todo en video y lo compartían en las redes sociales.
A los padres de uno de los bebés les llegó el video de su hijo, con estas enfermeras jugueteando con su cabeza y riéndose. Hicieron la denuncia en el centro médico, que investigó el caso y detectó que tres mujeres habían sido parte de la filmación.
Todas fueron despedidas. Sus licencias fueron revocadas y no podrán trabajar más en el sector de salud.
El padre del bebé contó a los medios sauditas que el que hijo tuvo que ser internado durante diez días por una infección urinaria en el hospital de Taif y quedó en shock cuando recibió el video de parte de un amigo en el que se vía el trato que le habían dado las enfermeras.