Daddy Yankee y Don Omar cantaron juntos por primera vez en Sudamérica

El puertorriqueño abrió el concierto 'Hasta el fin del mundo'. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

El puertorriqueño abrió el concierto 'Hasta el fin del mundo'. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

Daddy Yankee y Don Omar cantaron juntos Danza Kuduro, en el concierto de anoche en Quito. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

Si bien Don Omar aprendió a hacer reguetón de intérpretes como Daddy Yankee, el ex pastor puso en escena ayer, 16 de enero de 2015, un show superior. Ese era el comentario de los asistentes al concierto llamado 'Hasta el fin del mundo', que reunió por primera vez en Sudamérica a dos grandes del género urbano.

El espectáculo no contó con artistas teloneros, así que cuando los relojes se ajustaban a las 21:30, un video y fuegos artificiales anunciaron a Daddy Yankee. Carteles que agradecían su visita y lo halagaban se levantaron entre los asistentes. Bailarines saltaron a la escena y por una puerta inflable con las iniciales de su nombre salió el autodenominado Rey del Reguetón.

Desde ahí cantó La gasolina y saludó a Quito. Después de Busy Bumaye y Pose, con las que animó al público. El cantante puertorriqueño se detuvo para realizar una improvisación agradeciendo a los asistentes y saludando a sus seguidores del resto del Ecuador. Esta dinámica se mantendría durante toda su participación, entre canción y canción, para elogiar a las mujeres o interactuar con el público.

Los celulares se prendieron con Lo que pasó pasó, donde el intérprete invitó al público a cantarla mientras él escuchaba. Después de otros temas conocidos como Descontrol, se detuvo para agradecer a una de sus admiradoras, quien le dedicó palabras de admiración en un cartel.

Durante su presentación, recalcó que es un hermano más, y no un artista, tratando de acercarse a la audiencia. Seguido, la gente coreó canciones como La nueva y la ex y Pasarela.

Antes de finalizar su espectáculo, Daddy Yankee invitó a la gente a sacar sus celulares y tomar fotos y selfies del evento. Desde el escenario, él también se tomó una fotografía con su emocionado público.

El puertorriqueño abrió el concierto 'Hasta el fin del mundo'. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

El cantante aprovechó para estrenar su último sencillo, Sábado Rebelde, y anunciar que el video de esta canción será lanzado la siguiente semana.

Una veintena de canciones después, el puertorriqueño finalizó con Limbo y salió del escenario entre juegos pirotécnicos y confeti.

Los juegos artificiales causaron problemas técnicos que retrasaron 15 minutos la entrada de Don Omar. William Landrón inició su concierto a las 23:00 con el tema Dale Don Dale. El cuerpo de baile se destacó por fusionar break dance.

Siguió con Dile e invitó a las mujeres asistentes a corear la canción. Con Pobre diabla, el público se emocionó y desenfundó sus celulares para filmar y tomar fotos. Al finalizar el coreado tema, el reguetonero saludó a Quito. Don Omar aseguró que esta noche es histórica, pues luego de diez años de carrera, es la primera vez que puede compartir escenario con uno de los intérpretes al que él admira y de quien aprendió a hacer reguetón.

Pidió aplausos para su homólogo y llegó el esperado encuentro. "No sería justo que este concierto finalice" sin que Daddy Yankee y yo cantemos juntos. ¿Verdad?", manifestó Don Omar. El autor de Gasolina salió al escenario y después de un abrazo interpretaron Danza Kuduro.

Don Omar cerró el concierto con una lambada. Foto: Paúl Rivas / EL COMERCIO

"We´re the kings baby" o "Nosotros somos los reyes baby", proclamó Daddy Yankee antes de despedirse definitivamente del público quiteño.

Landrón continuó con su show con temas como Ayer la vi y Vuelve. Dos coristas acompañaron a Don Omar durante todo el concierto, pero la intérprete Natti Natasha se unió en el tema Hablando de amar.

El puertorriqueño incluyó en su repertorio temas como Salió el sol, Sexi Robótica y Sensual Hechizo, con las que el público bailó y saltó. El artista también recibió un peluche de las manos de una de sus seguidoras.

Para finalizar cantó la lambada Llorando se fue y se retiró después de agradecer al público. Juegos pirotécnicos que duraron unos cinco minutos cerrarron el evento.

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