La experiencia lesbiana se proyecta más allá de un encuentro sexual entre dos o más mujeres. El intercambio afectivo y la empatía con aquello llamado feminidad se compone de variantes de una realidad que en la literatura ha sido catalogada como novela lésbica.
Ya Virgina Woolf brinda una gran reflexión en torno a estos espacios extrasexuales. Si bien Orlando, el protagonista de su novela homónima, es convertido en mujer gracias a tres espíritus (Pureza, Modestia y Castidad; valores de la acompañante ‘ideal’), esto pasa para que él experimente los contratiempos a los que las mujeres están sometidas en una sociedad ‘heteronormada’. Y a pesar de su calidad literaria (Orlando es escritora), no obtendrá el suficiente reconocimiento debido a su sexo. Incluso dirá: “Con tal que piense en un hombre, a nadie le parece mal que una mujer piense”. Pero 50 años debieron pasar para que el ‘Orlando’ de Woolf adquiriese la categoría de novela lésbica. Esta tardanza, a razón de la socióloga española Fefa Vila, se debe al “rechazo social a representar literariamente la posibilidad del lesbianismo”. Es decir, libros en los que tal condición se supone sobreentendida pero es no explícita.
Para la académica chilena Ana Cruz es necesario un replanteamiento de la crítica literaria en su relación con lo lésbico. Lo que enriquece a este género es, precisamente, que puede prescindir de los géneros. No es necesario que un personaje se distinga como mujer y lesbiana para entenderla como tal. Debe fluir naturalmente, tal como sucede, según comenta Cruz, en títulos como ‘El hombre hembra’ (Joanna Russ), un mundo sin los dualismos del género; ‘El pozo de la soledad’ (Radclyffe Hall), en la que la homosexualidad es una condición natural; o ‘Toda pasión apagada’ (Vita Sackville-West), que narra la historia de una viuda que explora su cuerpo. En estas historias, las protagonistas que defienden su condición de ser libres de las definiciones propuestas por teorías sexuales.
Sin embargo, y a pesar de todo intento de innovación, la literatura lésbica no ha podido desconocer a Safo. En ‘Poemas y fragmentos’, ella convierte su pasión por las mujeres jóvenes en versos. Un clásico para entender al lesbianismo en su ámbito sentimental.
- ‘Poemas y fragmentos’ / Safo
Un clásico de la literatura lésbica, escrito en torno a las relaciones sentimentales de la poeta.
- ‘People in trouble’ / Sarah Schulman
La historia de amor entre una activista, su esposo y su amante lesbiana.
- ‘Aimée y Jaguar’ / Erica Fisch
Dos mujeres cruzan sus destinos en una época guiada por las ideas del Führer.
- ‘Demasiado tarde’ / Mary Wings
Un asesinato lleva a un grupo de lesbianas a crear complicidades impensables para su medio.
- ‘El pozo de la soledad’ /Radclyffe Hall
Una chica de alta sociedad prontamente descubre que su lesbianismo tiene causas naturales.
- ‘El hombre hembra’ / Joanna Russ
Cuatro mujeres deberán asumir su necesidad de enfrentarse al mundo machista.
- ‘Orlando’ / Virginia Woolf
Tres espíritus transforman a un escritor en mujer, llevándolo a experimentar lo femenino en su esplendor.
- ‘Toda pasión apagada’ / Vita Sackville-West
Tras la muerte de su esposo, Lady Slane vivirá plenamente sus deseos íntimos.