Un reclamo desesperado y enérgico es lo que la, mundialmente famosa, pianista venezolana Gabriela Montero hizo ayer y hoy, viernes 13 de febrero de 2014, al publicar, primero una intención de carta, y luego –hoy– una carta abierta en la que conmina a sus colegas Gustavo Dudamel y José Antonio Abreu a protestar en contra de la violencia que está viviendo Venezuela en los últimos días.
La posición política de Gabriela Montero, para muchos la mejor pianista que ha nacido en Venezuela desde Teresa Carreño, ya quedó clara en la época de su álbum Solatino, y desde entonces no recibió más invitaciones del Sistema de Orquestas (creado por Abreu en 1975) y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela para tocar en su país. Y mucho menos cuando publicó ExPatria, su primer concierto para piano y orquesta, que escribió para expresar la angustia que le genera el proceso político-social que ha experimentado Venezuela en los últimos tiempos, que fue presentada en Nuremberg, Alemania, el 20 de octubre de 2011.
“ExPatria es, antes que nada, mi reacción personal y mi absoluta objeción a la violencia diaria y cívica, a la corrupción, expropiación, secuestros, robos y asesinatos, que han hecho de Venezuela uno de los países más peligrosos del mundo”, dijo la artista un par de semanas después del estreno, cuando se generó la controversia por el trasfondo de su obra. Sin embargo, siempre había mantenido cierta cautela al hablar del director Gustavo Dudamel y el maestro José Antonio Abreu.
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Gustavo Dudamel.
Pero la intérprete rompió el silencio sobre los dos músicos venezolanos —miembros insignes de El Sistema (como se conoce al proyecto de educación musical para niños y jóvenes)— y su relación con el arte. En una publicación en su cuenta de Facebook , Montero reaccionó frente a la participación de Dudamel en los conciertos organizados por el gobierno venezolano por el Día Nacional de la Juventud, el 12 de febrero; el mismo día que hubo violentos enfrentamientos en varias ciudades venezolanas entre defensores del régimen de Nicolás Maduro y estudiantes universitarios críticos con la situación actual del país.
“Ha llegado el momento en el que los artistas que gozan de prominentes posiciones y voz pública, ya no pueden calladamente aceptar el hurto y destrucción de nuestro país debido a una corrupta ideología política, por miedo a renunciar a beneficios y apoyos económicos”, dice la pianista en su carta.
Montero interpela fuertemente a Dudamel diciéndole que “¿Hasta cuándo seguirás ciego a la lamentable realidad de tu país? ¿Hasta cuándo rehusaras ver que somos la antítesis de una sociedad en paz, justa y para todos?”.
En cambio, al maestro Abreu lo convoca a luchar por una Venezuela cuyas máximas sean “respeto mutuo, trabajo honesto y justicia para todos sin distinción social de ningún tipo”.
Reacciones de todo tipo se han dado debido a la carta de Montero, que hasta el mediodía del 14 de febrero, cinco horas de haber sido publicada en la red social, fue compartida por más de 2 500 usuarios. Uno de los más prominentes difusores de su contenido fue Norman Lebrecht, novelista y crítico musical inglés, conocido por sus columnas publicadas en The Daily Telegraph y sus programas de entrevistas en la BBC de Londres, y autor del libro Why, Mahler?
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José Antonio Abreu.
Por otro lado, las voces a favor de Dudamel no se han hecho esperar. Una de estas es la del analista internacional venezolano Juan Cristóbal Nagel, uno de los blogueros más críticos al régimen bolivariano. En ‘In defense of Dudamel’ , artículo publicado este viernes 14, Nagel defiende el derecho que Dudamel tiene a callar ante lo que pasa en Venezuela, ya sea porque está obligado a hacerlo para que El Sistema siga funcionando o porque simpatiza con la causa chavista.
Nagel precisa que de eso se trata la convivencia democrática: de respetar todas las posiciones y afinidades políticas, incluso las que a su criterio están equivocadas, como pudiera ser la de Dudamel en caso de que fuera afín al chavismo, algo que nunca ha hecho público el afamado director venezolano.
En respuesta a las críticas emitidas por Montero, Dudamel ha publicado lo siguiente: “Lo que nuestro Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela representa son los valores de Paz, Amor y Unión.
El 12 de febrero es un día especial porque fue el día en que nació un proyecto que se ha convertido en emblema y bandera de nuestro país en el mundo. Conmemoramos pues a toda la juventud, conmemoramos el futuro, conmemoramos la hermandad.
Nuestra música constituye el lenguaje universal de paz, por ello lamentamos los hechos acontecidos el día de ayer (miércoles 12 de febrero). Con nuestra música y nuestros instrumentos en mano, le decimos un no rotundo a la violencia y un sí contundente a la paz”.