Machu Picchu, 100 años de su presentación al mundo

'Montaña vieja’. La superficie edificada tiene unos 530 metros de largo por 200 de ancho, con una zona de terrazas agrícolas y otra de habitaciones, con 172 edificios en total. Foto: AFP

'Montaña vieja’. La superficie edificada tiene unos 530 metros de largo por 200 de ancho, con una zona de terrazas agrícolas y otra de habitaciones, con 172 edificios en total. Foto: AFP

Con ritos andinos, Perú celebrará hoy los 100 años del ‘descubrimiento’ de la ciudadela inca de Machu Picchu. El gran complejo arquitectónico de piedra construido en el siglo XV en lo alto de una montaña en la selva de Cusco , fue develada al mundo por el expedicionario estadounidense Hiram Bingham, quien llegó al lugar el 24 de julio de 1911.

Cien años después, las celebraciones sobre el hallazgo tendrán su día central, hoy, 7 de julio, bajo una caprichosa explicación oficial de que en esa fecha se cumplen cuatro años de que la ciudadela fue considerada como una de las Nuevas Siete Maravillas del Mundo Moderno.

Un siglo después de su descubrimiento, el desafío de este lugar es su preservación. La Unesco, que en 1983 declaró a Machu Picchu como patrimonio de la humanidad, expresó que el centro será sometido a una vigilancia reforzada, con énfasis sobre “el exceso de visitantes” y la “construcción de una ruta cercana”.

Ello, mientras que los lugareños prefieren referirse a la llegada de Bingham no como un descubrimiento. La mayoría de estudiosos coinciden en que el mérito de Bingham fue poner a Machu Picchu en el mapa del mundo, aunque estudiosos lo acusan de haber despojado a Perú de sus riquezas, pues en tres expediciones el explorador se llevó a la Universidad de Yale 44 000 piezas, 366 de las cuales fueron regresadas en mayo pasado. También testimonios históricos demuestran que al menos dos alemanes, un británico y un francés, además de peruanos, conocían la existencia de la ciudadela en la selva del departamento surandino de Cusco, antes de la llegada de Bingham.

El historiador Donato Amado, de la Universidad San Antonio Abad del Cusco, destaca a Augusto Berns, un ingeniero y buscador de oro alemán que llegó a Machu Picchu en 1867. Por esos años otro alemán, el geógrafo Herman Göhring, llegó a la región para construir una carretera por encargo del gobierno de la época. “Berns y Göhring con toda seguridad estuvieron en Machu Picchu e incluso hicieron mapas de la ciudad”, sostiene el historiador.

Otros personajes también hicieron mapas de Machu Picchu: el austríaco-francés Charles Wienner y el inglés Clement Markham, quien publicó un mapa del lugar en 1910 en la Royal Geographical Society de Londres. También mencionan los historiadores que el hacendado local Agustín Lizárraga estuvo en Machu Picchu nueve años antes que Bingham y que incluso escribió su nombre en una de las piedras de la ciudadela.

Así como su descubrimiento, la función que tenía Machu Picchu también ha sido cuestionada. La imponente ciudad de piedra al sur del Perú pudo ser un centro ceremonial o un sitio de descanso de nobles incas; eso, mientras que algunos expertos descartan que haya sido fortaleza militar.

Para el antropólogo estadounidense Richard Burger, de la norteamericana Universidad de Yale, Machu Picchu era en su época de esplendor un centro de descanso para la nobleza inca más que un lugar sagrado. Esta postura marca un contraste con opiniones -como la del historiador y arqueólogo peruano Federico Kauffmann o la historiadora María Rostworowski- que sostienen que la ciudadela estuvo dedicada a la adoración de dioses o fue lugar para rendir culto al inca Pachacútec, quien habría ordenado su construcción.

Aunque los guías mencionan a los turistas que la ciudadela fue una fortaleza militar, los expertos consideran poco posible que esta hubiera tenido ese fin, y señalan como prueba que las fuentes de agua y alimento no hubieran permitido un largo asedio; además porque “las fortalezas militares de los incas difieren en la forma de construcción”. Así, el debate es también parte de las celebraciones en Machu Picchu.

Más de la ciudadela

La expedición de Bingham, de 35 años, nacido en Hawái, costó USD 35 000, financiados por su suegro - dueño de la joyería Tiffany- y la Universidad de Yale.

Con sus 32 592 hectáreas , Machu Picchu es apenas un 0,025% de la superficie del Perú, pero contiene el 10% de su fauna y 22% de su flora.
Machu Picchu significa Montaña Vieja.

Suplementos digitales