Entrevista a Juan Valdano, escritor y académico de la Lengua.
¿Cuáles han sido los aportes de los ganadores del Premio Nobel de literatura latinoamericanos a la región?
América Latina ha estado presente en la literatura universal fundamentalmente con aquellos escritores que han dado una versión propia del mundo latinoamericano y en todos ellos se trata de una literatura que se nutre de un modo de ser de la región.
En cada uno de los seis premios Nobel latinoamericanos ¿el mundo ha redescubierto la región o solo la literatura de la región?Las dos cosas. El mundo ha descubierto la literatura del continente, la voz de Hispanoamérica, que no es solamente España a través de América Latina sino el sustrato americano indígena y africano. Somos un pueblo y una cultura mestizos, imbricados en diversos mundos como dijo sobre Perú Vargas Llosa en su discurso de aceptación del Nobel; somos un microcosmos, como el ‘Aleph’ de Borges, que reproduce la diversidad y grandeza del universo.
¿El discurso de Mario Vargas Llosa, que promueve la lectura, de alguna manera desbroza el camino para que el gran público se acerque a la literatura?
Este no es un discurso típico porque los discursos de los Nobel casi siempre han tratado de resumir su visión de la vida, la literatura y el arte. Cada uno imprime en su discurso lo esencial de su pensamiento. Recuerdo, por ejemplo, el discurso que en 1957 pronunció Albert Camus en Estocolmo sobre su pensamiento humanista en un contexto en el que Europa aún vivía los rezagos de la Segunda Guerra Mundial.
Volviendo a la pregunta anterior, en la práctica ¿este elogio de la lectura incentivará a la gente a leer o el discurso se quedará en el papel?
No son palabras vanas, yo creo que es importante este tipo de mensaje que dio Vargas Llosa, sobre todo para sociedades como las nuestras, para las cuales el libro y la lectura son ajenos. Por eso creo que incentivará sobre todo a maestros y estudiantes en las escuelas, quienes verán en el actual Nobel un ejemplo a seguir. La lectura debe ser uno de los temas fundamentales de todo programa educativo, porque es a su vez un factor decisivo en la organización del pensamiento.
¿Recuerda algún otro discurso de un Nobel de Literatura que haya hecho un llamado tan enfático a retomar la lectura como hábito?
Yo creo que no se ha hecho algo así antes. Los Nobel por lo general hacen una síntesis de su pensamiento, de su trayectoria y Vargas Llosa también lo hizo, pero resulta que lo que primero aparece es esta experiencia que dice que le cambió la vida: aprender a leer. Claro que también habla de escribir como un vicio y a la vez un placer maravilloso.
¿Será este analfabetismo funcional que vive una buena parte de la sociedad el que lleva a Vargas Llosa a invitar a la gente a leer?
Yo creo que sí. Porque la alfabetización por sí misma no quiere decir que ayude a la lectura como hábito. Es un hecho que hoy en el mundo hay menos analfabetos que hace 100 años, pero también es cierto que siguen habiendo analfabetos funcionales (que saben leer, pero que no leen habitualmente). Por desgracia podemos decir que inclusive hay analfabetos con título superior, que exhiben hasta títulos universitarios, pero que no han pasado de leer un libro de texto o su propio cuaderno de apuntes.
Como profesor, usted ha vivido esa realidad’
Sí, es muy duro incentivar a que los estudiantes vayan a los libros, que entiendan conceptos…
Que además desarrollen un pensamiento crítico.
Exacto, y eso es en parte un resultado de la pérdida del buen hábito de la lectura.
¿ Cómo influye la Internet?
Internet favorece la información, la búsqueda de datos, pero no la lectura reposada, esa será siempre una potestad del libro.