Un pergamino con la fecha de su nacimiento, la primera casa chillaneja (en Chillán) en que residió, imágenes suyas vestido de civil -cuando fue alcalde de Los Ángeles- y, también, escenas del Abrazo de Maipú y de la Bata-lla de Rancagua incluye el mural ‘Laureles al Libertador’, que retrata siete momentos de la vida de Bernardo O’Higgins (1778-1842), prócer de la independencia chilena.La obra, que se puede ver desde ayer en una de las estaciones de Metro de Santiago (la de Escuela Militar), termina con la firma del Acta de la Independencia. Mide 8 metros de largo por 5 de alto.Así quiso festejar los 200 años de Independencia la generación 2009 de los Oficiales de Reserva del Ejército de Chile (CAOR), patrocinadores del mural, que encomendaron la tarea a Guillermo Valdivia, experimentado pintor y muralista, quien en 1991 se impuso la meta de pintar 20 grandes murales históricos de cara al 2010, año del Bicentenario. El mural inaugurado ayer es el número 18 del artista, y estará expuesto a una gran cantidad de público a diario, pues según datos de la administración del Metro de Santiago, en esta estación circulan más de 180 000 personas cada día. Raphael Bergoeing, presidente del Directorio de Metro de Santiago, cree que esta obra, que se remite a otras iniciativas igualmente de corte artístico como las de los metros de Praga (República Checa) y Moscú (Rusia) -por poner solo dos ejemplos- conectará a los usuarios con la cultura. El muralista trabajó en secre-to por seis meses en un taller porteño (en Valparaíso), con acrílico sobre madera y solo cinco colores: azul, rojo, blanco, amarillo y negro. Y junto con estudiar “a fondo” la historia del prócer, tomó ilustraciones de libros como referentes -las modificó un 90%-, pero mayoritariamente cuadros de fray Pedro Subercaseaux. Ahora que la tarea está cumplida, Valdivia hace un llamado: “Del Bicentenario se habla en todas partes, pero es fundamental hacerle un gran homenaje a O’Higgins, artífice de nuestra independencia. Este mural es una buena aproximación para estudiantes, por ejemplo”.En el centro de su mural, Valdivia retrató a O’Higgins sobre su caballo, guiándose por una imagen clásica: “El monumento que está en la Plaza de Armas de Rancagua, y en la Plaza de la Ciudadanía en Santiago, que recuerda la gran batalla que cerró la Patria Vieja”. Sumó, además, a O’Higgins con su uniforme de Director Supremo, mientras sostiene el Acta de la Independencia. “Copié el texto fielmente, con nombre y firma. Pero además usé la letra original, que se podrá leer perfectamente”.