Un día para festejar al libro y al idioma

Imagen sin titulo

Imagen sin titulo

En este 2011, la contrición que supone el Sábado de Gloria coincide con las celebraciones del 23 de abril, festejos que giran alrededor de la lengua y la palabra.Varios son los motivos que señalan a este día en el calendario de la cultura. Los orígenes se remontan a las prácticas aragonesas y catalanas por el onomástico de San Jorge, cazador de dragones; en cuyo nombre se adoptó la tradición de que los hombres regalaran rosas a las mujeres y que estas devolvieran el obsequio en la forma de un libro. Ya en 1995, la Unesco universalizó la fecha como el Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor.

En el marco de las celebraciones, desde el 2001 se ha elegido una ciudad del mundo como la Capital Mundial del Libro, honor, que para el 2011 corresponde a Buenos Aires, que desarrolla su Feria de Libro hasta el 9 de mayo.

Otro factor que sumó para la institucionalización de la fecha responde a la muerte de tres grandes cultores de la palabra y la literatura: el español Miguel de Cervantes, el peruano Inca Garcilaso de la Vega y el inglés William Shakespeare. Los tres autores murieron el 23 de abril de 1616; los dos primeros según la fecha marcada por el calendario gregoriano, y Shakespeare según el juliano.Los años han dejado que otros autores sumen sus nombres a la conmemoración, pues su nacimiento o su muerte han coincidido con la fecha. Tal es el caso del Nobel islandés Halldór Laxness; el teórico francés George Steiner; el romántico inglés William Wordsworth; el prosista catalán Josep Pla; o la novelista venezolana, Teresa de la Parra.

Asimismo, el 23 de abril se ha instituido como la fecha de entrega del Premio Cervantes, galardón que en este año llegó a las manos de la narradora española Ana María Matute, autora de ‘Olvidado rey Gudú’, entre otros.

La relación entre la fecha y Cervantes también dio pie para que el 23 de abril sea designado Día Mundial del Idioma Español, una lengua que bordea los 500 millones de hablantes en el mundo.

Suplementos digitales